TODOS SOMOS VULNERABLES. AMERICA(NO) DEL SUD
Por Florencia Silva
“Esto empezó cuando con Rafa Iglesia soñábamos con hacer un premio latinoamericano para europeos”, decía Solano Benítez en Tucumán, en el primer conversatorio de America(no) del Sud. El espíritu del giro por tres ciudades del interior de la Argentina quedaba muy claro. Son conversatorios, no son conferencias, aclaraban. “Vamos a conversar, vamos a decidir entre todos, nosotros y ustedes, cuáles son los temas sobre los cuáles la disciplina debe trabajar y vamos a juntar dinero para encargarle a alguien el trabajo”. Y ese alguien será nada menos que Rafael Iglesia.
La semana anterior hablé con mi hermano para ver si podía hacer una nota sobre esto en la radio, la difusión de algo así me pareció fundamental. Intenté explicarle el trabajo de estos arquitectos. Noté que no me alcanzaban las palabras, no sé cuántos links le mandé para hacerme entender, quería que captara lo esencial y creo que lo logré.Ese mismo día llamé a Ricardo, que me atendió con la calidez de siempre y me contó muy emocionado que Rafael había dicho anoche en Córdoba, frente a más de 1000 personas, que sentía que por fin había vuelto. En ese preciso momento tomé verdadera dimensión de lo que iba a ser America(no) del Sud. Ricardo también dijo que Angelo (Bucci), Solano (Benítez) y Jose María (Sáez Vaquero) vendrían a la FAU al otro día, para explicarle a todos de qué se trataba el evento y a pedirles que fueran.
Recordar el orden de las exposiciones me costó mucho (de hecho todavía no puedo decir cuál fue) y supongo que es porque en mi cabeza se entrelazan los múltiples discursos en uno solo.
Por último, lo que realmente me estremeció fue el amor de Solano. El amor con el que cedió su lugar de expositor para generar LA CONVERSACIÓN de la noche. En un principio los temas iban fluyendo entre él y Rafael, y de a poco, todos se fueron ubicando alrededor como si estuvieran en el living de la casa de cualquier amigo.