Aprovechamos la visita para ir al pueblo de mi tía y ver a mis primitos pequeños. Así que he hecho cosas muy divertidas como saltar en su colchoneta en el patio de casa (wiiii) y disfrutar de la actuación de dos amigos acróbatas que hacían cosas im-pre-sio-nan-tes. ¡Y lo mejor de todo es que tienen una escuela de circo en Madrid!
Pero después de esta pausa había que volver y continuar con la rutina. No me importa, adoro mi trabajo.
Os dejo con mi top 5 de esta semana:
1- Comparación side by side de actores con las personas reales a las interpretaban
El título ya lo dice todo, pero esto es una pasada, en serio. Zimbio recopila los rostros más conocidos de actores y actrices y los compara con los rostros de las personas reales a quienes interpretaban en las películas. Así vemos quién se parece más y quién menos. Y además está genial porque se puede deslizar la barra del medio entre rostro y rostro para ver mejor uno y otro. Caras tan conocidas como Nicole Kidman haciendo de Grace Kelly, o Morgan Freeman como Nelson Mandela.
Versión actores y versión actrices.
2- Jane Birkin ya no quiere que el famoso bolso lleve su nombre
Una de las noticias que más impactado esta semana en el mundo de la moda. El famoso Birkin. El bolso de Hermès cuyo nombre se debe a la actriz Jane Birkin, ya que fue ella quien lo inspiró, anhelando el bolso perfecto. Es uno de los bolsos más famosos de la tierra y tener uno de ellos costaría muchos ojos de la cara y muchos años de esperar sentado.
La razón es porque los Birkin se hacen con piel de cocodrilo y hace poco la actriz descubrió cómo de mal lo pasan los cocodrilos para que utilicen su piel para prendas (le costó...) y ahora se niega a que su nombre se relacione con el maltrato animal. Veremos cómo avanza la cosa. De momento podéis leer el artículo completo en El País.
3- La foto de la modelo corriendo en bikini que ha indignado a las redes sociales
Vamos por partes. Esta semana Glamour compartió este artículo diciendo haber una polémica con unas fotos publicitarias que le habían hecho a una modelo corriendo con el carrito de bebé de su hija. La polémica no venía por correr con la niña y que se pudiera hacer daño, ni de ningún colectivo de madres plastas que se quejaran de una imagen falsa de la maternidad, ni blabla. La polémica venía porque la modelo estaba corriendo en bikini. Ni más ni menos.
Lo que a mí me llamó la atención no fue eso, porque uno se harta ya de leer polémicas por chorradas, sino los comentarios de la publicación de Glamour en Facebook. Cuando uno lee estas cosas y pincha en los comentarios lo que cree que se va a encontrar es gente dándole a la polémica y metiéndose con la modelo en bikini por esto o lo otro. Pero no. Todo lo contrario. Los comentarios eran del estilo: "es que las que se quejan son unas amargadas, si tanto les molesta que tenga ese cuerpazo que se vayan al gimnasio", y etc.
Mi opinión. Para empezar me sorprendió porque no me lo esperaba, y fue una sorpresa grata porque yo también lo estaba pensando. Ya estoy harta de tanta queja, que las tallas por aquí y las mujeres irreales de revista por allá. Pues mira, es lo que hay y punto, es publicidad. Lo feo no vende. Pero al margen de eso, porque al fin y al cabo esa no era la polémica (aunque nadie se dio cuenta), sí era un error sacarla corriendo en bikini. No por el cuerpo ni opiniones, sino porque nadie corre en bikini. Podemos correr con shorts deportivos ajustados muy cortos y un top deportivo (que para el caso...), pero un bikini... En fin. Cada uno que piense lo que quiera, ¿no?
4- Cuando Pixar se olvidó de que había niños en la sala
Hemos crecido con Pixar. Hasta el punto de que yo creo que hoy en día me hace más ilusión una peli de animación a mí que a un niño y que su público somos más nosotros que ellos. Y, en el fondo, Pixar lo sabe. Puede que no nos diéramos cuenta pero en las películas Pixar que veíamos de pequeños ya había mensajes muy duros que no llegábamos a entender, hasta ahora.
El País digital comparte un artículo de 7 momentos en que las películas de Disney se olvidaron de que había niños en la sala. Bullying, adulterio, trastornos psíquicos... Ya veréis.
5- Yo paso de interactuar con tu página de Facebook
No sé si habéis dado entre las redes con este post, sobre todo los que sois bloggers o vloggers o youtubers o lo que seais en este mundo de inmenso internet, pero es interesante de leer, más que nada por la sensación de desahogo. Es algo que todos los que tenemos una página de Facebook hemos pensado alguna vez. "Y si 20 han visto la publicación, ¿por qué solo han pinchado 2?" "¿Por qué nadie le da a like si no dejan de subir las visitas?" "¿Estoy haciendo algo mal?" Alienta mucho a interactuar con personas de otras páginas y creo que eso nos viene bien a todos. El ego es algo a lo que hay que renunciar la mayoría del tiempo para ser un poquito más altruista y amable.