La toronja es una fruta cítrica, conocida en algunos países como pomelo o grapefruit; es un hibrido de un cítrico y la naranja. Las toronjas o pomelo rojo se produjeron por una mutación de la variedad blanca, el color rojo se debe a su contenido de antioxidantes el cual es superior al de la variedad blanca.
La toronja tiene una amplia aceptación entre las personas ya que los consumidores de esta fruta le atribuyen la propiedad de bajar de peso y reducir la presión alta. Lo cierto es que la toronja, especialmente la variedad roja, ayuda a reducir el colesterol de la sangre debido precisamente a su propiedad antioxidante, como lo demostró recientemente un estudio israelí.
La toronja como un todo es reconocida por sus grandes beneficios. El extracto de sus semillas es utilizada como remedio contra los hongos, la infusión preparada con sus flores se usa como tratamiento para el insomnio.
La toronja estimula el tracto digestivo y también se le han atribuido propiedades diuréticas. La pulpa por sus propiedades ácidas se utiliza para tratamiento de infecciones urinarias y la pectina que contiene puede ayudar a reducir el colesterol.
En general, no importando el color de la toronja, una taza aporta aproximadamente 85 calorías, 1 gramo de proteína y 3 gramos de fibra. Las de color rojo contienen más vitamina A que las de color blanco.
La toronja contiene todas las vitaminas del complejo B con excepción de la vitamina B12, también son una buena fuente de vitamina C, calcio, potasio, magnesio y contiene trazas de hierro y zinc. La vitamina C y el beta-caroteno presentes en cantidades elevadas en el zumo de esta fruta actúan como potentes antioxidantes.
Además, el ácido fólico también reduce los niveles de homocisteína, un intermediario en el metabolismo proteico, que se sabe está implicado como factor de riesgo en enfermedades cardiovasculares.
Se estima que un jugo elaborado con dos frutos medianos cubre el 100% de los requerimientos de este nutriente, útil para:
- Mantener sanos los tejidos y cicatrizar heridas, ya que es empleada para fabricar colágeno, compuesto que representa para el cuerpo humano lo mismo que las estructuras de hierro para un edificio.
- Fortalecer al sistema inmunológico, es decir, el que nos protege de infecciones ocasionadas por virus, bacterias y hongos. Por ello la toronja y los cítricos son de gran utilidad en la dieta invernal para prevenir padecimientos en vías respiratorias y garganta.
- Actuar como antioxidante, es decir, ayuda a eliminar radicales libres, que son sustancias responsables del envejecimiento prematuro de tejidos y del surgimiento de células cancerígenas; así, contribuye a la salud de la piel que se expone por tiempo prolongado a los rayos del Sol, pero también protege del cáncer de esófago, estómago, páncreas, útero, recto y mama.
- Evitar el escorbuto, enfermedad caracterizada por sangrados en encías, articulaciones y uñas, en la que es frecuente el cansancio, irritabilidad y pérdida de apetito. Se debe a la carencia de colágeno y vitamina C.
Para ayudar a la toronja en su labor sanadora, se puede agregar 8 vasos de agua durante el día y vegetales frescos con las comidas y frutas del tiempo para amortiguar entre uno y otro alimentos. Se recomienda para curar la diabetes, la hipoglicemia y algunas enfermedades de los ojos. Su contenido vitamínico se usa también para curar la inflamación de próstata, así como para aliviar los riñones. Se recomienda consumirla cuando se quiere bajar de peso, en ayunas. Además es un laxante, regenera el sistema nervioso, limpia la piel y vigoriza los tejidos de los pulmones.
TORONJA PARA LA BELLEZA
Su alto contenido en vitamina C y propiedades antioxidantes le aportan luminosidad a tu piel. Es un astringente muy beneficioso para la piel grasa, cierra los poros y combate el acné. Es un extraordinario desintoxicante de tu cutis, pues estimula su circulación sanguínea.
El mejor remedio es limpiar el cuerpo internamente para ayudarlo a que el proceso de sanación se active y para ayudar a que la piel expulse las impurezas en forma natural.
COMO DESINTOXICANTE
La toronja, tomada internamente, tiene muchas propiedades que ayudan a la digestión y al sistema urinario. Otra de sus propiedades es que ayuda en el metabolismo de las grasas y desintoxica el hígado.
Estas funciones son muy benéficas en el proceso de desintoxicación interno, pero la mejor función que tiene la toronja es el ayudar a que la persona tenga una piel sana y radiante.
Para lograr este proceso de desintoxicación, se recomienda tomar un jugo de toronja en ayunas y otro antes de irse a dormir, después que hayan pasado un mínimo de dos horas desde la última comida fuerte.
Para ayudar a la toronja en su labor sanadora, se puede agregar 8 vasos de agua durante el día y vegetales frescos con las comidas y frutas del tiempo como botanas entre uno y otro alimentos.
De ser posible, se puede ayunar un día a la semana (o cuando menos al mes) con puro jugo de toronja.
COMO MASCARILLA
Aplicada en forma externa, el jugo de la toronja en suaves palmadas sobre un rostro limpio, tiene propiedades exfoliantes. Para aplicarlo, se recomienda lavar la cara con un jabón que no sea abrasivo (neutro). Enjuagar con abundante agua tibia y secar con una toalla limpia o dejar la cara secar al aire.
La mascarilla de toronja se puede aplicar diariamente durante cinco días y se deja descansar dos días para que la piel se renueve. Se debe usar filtro solar para proteger la piel nueva.