TOROS, OSOS Y OTROS ANIMALES…EN LA ECONOMÍA
De nuevo nos fijamos en algunos animales, y los utilizamos para definir diversas estrategias y/o comportamientos de las economías e individuos sobre decisiones financieras y principalmente en las bolsas de valores. El uso de metáforas en el mundo bursátil y financiero, permite identificar tendencias y comportamientos, asociándolos principalmente con el toro, el oso, el lobo, el gato, la oveja, el cerdo, el tigre, la paloma, el halcón… o incluso el diablo.
El toro, símbolo de Wall Street, no es el que más preocupa a los inversores, precisamente lo contrario. Refleja optimismo y confianza al estar ante un mercado con tendencia alcista y favorable (el toro cabecea hacia arriba). Y con la perspectiva de que sea de manera sostenida en el tiempo, por un periodo de tiempo amplio y prolongado. Tiene una característica, se considera que no es fácil anticipar.
Si asociamos al toro, con tendencias alcistas, al oso, al contrario, lo identificamos con movimientos y tendencias bajistas (el oso ataca con la cabeza hacia abajo), Estos dos animales representan a los mercados financieros, bursátiles, tanto alcistas ¨mercados bull (toro)¨, cómo bajistas ¨mercados bear (oso)¨. Parece ser que su origen dimana de las peleas de toros contra osos que se celebraban en el siglo XIX en EE.UU.Una metáfora muy conocida sobre el comportamiento de algunos partícipes o agentes, incidiendo en los mercados incluso de formas poco elegantes, éticas o lícitas, se representa con el lobo. Es símbolo de la agresividad, tácticas, técnicas y estrategias que utilizan algunas personas, que llegan a cometer actos de estafas e intentos de manipulaciones de los mercados, en la búsqueda de pingues beneficios.
Motivado por sus acciones, algunos bróker y agentes, se encuentra en prisión. Y son varias las películas que la industria del cine ha creado con esta temática. De las últimas y muy conocida ¨El lobo de Wall Street¨.
El autor con el famoso toro de Wall Street
Los rebotes puntuales, los remontes momentáneos, con poca consistencia y que no cambian los mercados, se conocen como el rebote ¨del gato muerto¨. Y si durante las crisis financieras y bursátiles, las caídas son muy pronunciadas, llegando a mínimos, se conocen como ¨las caídas del diablo
Posiblemente los mencionados sean los más conocidos, pero en el argot podemos encontrar referencias a otros animales, cómo símbolos de los comportamientos de países, entidades o individuos, en sus formas de funcionar por los mercados.
Se conocen como ovejas, a aquellas personas individuales que actúan en los mercados a ¨modo de rebaño¨, es decir siguiendo indicaciones, comentarios o consejos de otras personas. Realmente no son conscientes del riesgo que supone sus decisiones.
También están los cerdos. Apelativo (dicen cariñoso) con el que se refiere a los pequeños inversores, verdaderos sufridores de las crisis, y que cómo consecuencia de las mismas parece son “enviados al matadero”. A nivel empresas, ya dediqué atención en capítulo anterior a las empresas unicornio.
A nivel estados, son conocidos los países tigres. Nos referimos a aquellas economías con altas tasas de crecimiento. Los más representativos, son Singapur, Corea del Sur, Malasia, Tailandia. Su crecimiento viene determinado por las importantes inversiones de capital extranjero, animados por los incentivos fiscales que aportan sus políticas y que generan importantes desarrollos de infraestructuras y de los sectores productivos.
Las políticas económicas de los estados también tienen su simbología animal. Los partidarios de políticas expansivas, flexibles y con tipos de interés bajos, para intentar el crecimiento son denominados palomas, y los partidarios de políticas económicas ajustadas, restrictivas y con tipos de intereses altos, son conocidos como halcones.
Si nos referimos al tigre, para mencionar a las economías con importantes crecimientos, habrá que ir pensando que nombre buscar para denominar a las economías de países en recesión. ¿No me digan que pensamos en el mismo país y en el mismo animal?
Miguel Angel OTIN LLORO