Me encanta la leche condensada y las torrijas así que este año decidí fusionar las dos cosas y ha salido una receta excelente.
Ingredientes:
- Una barra de pan para torrijas.
- 750 mililitros de leche.
- 250 mililitros de nata para montar.
- 5 cucharadas de leche condensada.
- Cáscara de un limón.
- Una rama de canela.
- 3 huevos.
- Aceite de girasol.
- Azúcar y canela para rebozar.
- Leche condensada para adornar.
Elaboración:
Cortamos las rebanadas de pan y ponemos a cocer la leche y la nata con la cáscara de limón, el palo de canela y la lecha condensada. Una vez que hierva se deja infusionar y luego se bañan las torrijas con la mezcla. Primero por un lado y luego por el otro y se dejan como mínimo cuatro horas impregnadas con el líquido.
Luego se rebozan en huevo y se comienzan a freír en aceite de girasol. Se sacan, se escurren se rebozan en azúcar y canela y antes de servir se les añade por encima un chorro de leche condensada.