Tengo que confesar que las tortillas de patata no son mi plato estrella. No siempre doy con el punto y tiemblo al darles la vuelta. Pero la semana pasada recibí un set de productos Magefesa y no se me ocurrió mejor forma de estrenar una de las sartenes que con una buena tortilla de patatas sin huevo y con pimientos. ¡Vamos a por la receta de tortilla de patata vegana!
Ingredientes:
- 4 patatas medianas
- 1/2 cebolleta
- Pimiento rojo y verde al gusto
- 7 cucharadas de harina de garbanzo
- Agua
- Aceite de oliva
Preparación:
En primer lugar tenemos que pelar y cortar las patatas en rodajas finas, después las lavamos para quitarles almidón. Hacemos lo mismo con el pimiento y la cebolla, Freímos todo con aceite bien caliente pero a fuego medio hasta que las patatas empiecen a estar blandas, no tienen que quedar crujientes.
Mientras fríen, podemos ir preparando la harina de garbanzo. Le añadimos agua poco a poco y vamos batiendo con unas varillas, La mezcla tiene que quedar de una consistencia similar al huevo batido, pero un poco más espesa.
Sacamos las patatas con la cebolla y el pimiento del fuego y escurrimos un poco. Después mezclamos con el preparado de harina de garbanzo y echamos en la sartén, pero esta vez con sólo una gotita de aceite. Si es una buena sartén antiadherente como la que yo usé de Magefesa no tendréis problema, ya que con que una gota y estando bien caliente es casi imposible que pegue. En cualquier caso, lo mejor es no poner el fuego muy alto para que no se queme ni se pegue y se cuaje poco a poco.
Separamos los bordes de la tortilla de la sartén y después de un par de minutos damos la vuelta a la tortilla con ayuda de un plato. Cuidado si la sartén pesa mucho (o demasiado poco) o si es un poco vieja, porque el mango puede no ser muy firme y acabar con la tortilla en el suelo o en el fregadero. De nuevo escoged una buena sartén como la que yo usé, que tiene el peso perfecto para darte sensación de firmeza pero a la vez es muy manejable. Dejamos hacerse por el otro lado y retiramos del fuego. Dejamos templar un poco ¡y listo!
¡Que aproveche!