Va pasando el tiempo y no encuentro el momento, ni nada de nada, para que Concha me acepte en su "Club de la Tortilla Perfecta". Estoy deseando que me incluya ✌✌
Hay tantas tortillas en su club, que quieres sorprenderla con alguna que tenga algo diferente, pero si le mando una que ya está hecha ¡voy apañada! Es como si para tu álbum de cromos te dan uno repetido.
He pensado en muchas cosas y no me convencían, o no encontraba ese ingrediente que la hiciera distinta. Con mi tortilla no las tengo todas conmigo ¡qué va! después de decidirme por ésta lo mismo ya tiene su réplica, jjj. Total, no va a pasar nada, porque Concha es toda generosidad. Tal vez me consienta presentar otra más adelante 😉.
Bueno amiga, en tus manos queda, ya verás que de perfecta le queda un camino (soy poco vacilona) pero que de completa le sobran ¿tres pueblos? jjj, eso se ve, no lo podemos negar.
Si queréis aprender mil y una maneras de hacer estupendas tortillas, de cualquier cosa, pero con mucho amor, no dejéis de pasar por su blog, os lo recomiendo.
- Ajos tiernos, 2 manojos.- Espárragos verdes, 1 manojo.- Champiñones grandes, 4 (primos hermanos de tus Portobellos).- Taquitos de jamón serrano.- Gambitas arroceras, un puñado.- Huevos, L, 7.- Aceite de oliva, 6-7 cdas.- Pimienta negra recién molida.- Sal.
Elaboración:
Limpia los ajos tiernos, quita las raíces y la primera capa externa. Lava los espárragos y trocea parejo. Corta un trocito del pie de los champiñones y pélalos (yo lo hago así, a mi manera). Limpia las gambas.
Rehoga brevemente los ajos tiernos cortados en rodajas y enseguida incorporas los espárragos, todo a fuego medio, moviendo de vez en cuando hasta que se ablanden un poco. Después añade los taquitos de jamón y sigue rehogando. Por último agrega los champiñones en dados, no muy grandes.
En tres minutos, más o menos apartas la sartén del fuego y vuelcas en un cuenco dónde has batido, (no mucho) los huevos, a los que has añadido un poquito de sal y pimienta.
En una sartén (buena, eh!!! de las que no se agarran), pincelada ligeramente de aceite, "entretente" en colocar en círculo las gambas. Pon al fuego y vierte con mimo, usando un cucharón, sobre las gambas el batido de huevos.
A fuego bajo, cuaja la tortilla, no le des la vuelta hasta asegurarte que ha cuajado bien la parte de abajo. Vuelve con un plato o tapadera y hazla por el otro lado. Cuaja a tu gusto y sirve.
¿Veis al trasluz las gambitas?