Entre los datos más interesantes están: Por si había alguien que pensara que "bueno, es normal que durante el día uno tosa. Si de repente toca en el concierto, ni modos".
Pues falso. La gente tose el doble de lo que tosería normalmente. Es decir, la situación (el concierto) provoca la tos.
Un dato curioso es el de efecto "avalancha", que hace que la tos sea "contagiosa" en el concierto. No puede toser uno, porque inmediatamente vienen los demás. Esto hace también que mientras más grande sea el público, la tos aumente más que aritméticamente.
Las razones de este fenómeno comienzan a aparecer. Y una sentencia es impactante: La tos parece ser hecha a propósito por las personas.
Dejaré los links para el que quiera informarse mejor:
Aquí en el sitio de la BBC
Aquí en The Independent
Aquí uno en español
En cuanto a mi punto de vista:
Entre las distintas razones, yo apoyo a los que piensan que desgraciadamente, la tos se debe a un "aburrimiento". Y se nota, por el aumento de tos en pasajes muy suaves o en obras del siglo XX que no sean muy conocidas. Tal vez es una forma en que el organismo quiere decir "aquí estoy y estoy vivo". Todo debido a que el público no está haciendo nada y esta situación es incómoda para el cuerpo.
Ahora bien, ¿que es lo que los no-tosedores hacen?: Escuchar. Cuando se escucha activamente, el cerebro trabaja (está activo y tiene puesta su atención) y no necesita revelarse con tos. Por eso es que con obras muy vistosas que obliguen a atraer la atención, la tos disminuye. Mientras sea algo evidentemente entretenido, la gente no se aburre. Pero si es algo muy lejano a lo conocido o entretenido... la mente puede perder la atención fácilmente. Mi punto es básicamente... falta aprender a escuchar.
Pero esa es solo mi opinión, probablemente el fenómeno sea un poco más complejo.
Discuto conceptos semejantes en:
El Escuchar y el Oír La música clásica es aburrida