No tiene secreto. El único secreto de estas Tostas de Feta con Pesto Rojo y Verde son sus ingredientes, que sean de buena calidad y sabrosos. En casa son protagonistas de muchas cenas y en alguna ocasión, los fines de semana, las preparo a modo de entrada o como aperitivo.
En esta ocasión aproveché para probar el Herbstick de Lékué y dejar preparado allí el aliño para utilizarlo con las tostas y con otros platos. En este caso utilicé los ingredientes típicos o básicos de un pesto rojo y de un pesto verde. Otra cuestión serían las proporciones que quizás no coincidan con las propias del pesto.
El Herbstick me permite mezclar allí todos los ingredientes, guardarlo y congelarlo. A la hora de su utilización bastará rallar un poquito como he hecho en esta ocasión, o cortar una rodajita y dejar que se derrita encima de una carne o de un pescado, o simplemente "pintar" con su contenido la sartén en la que vamos a saltear algo.
Pero bueno, es una opción, pasemos a ver cómo he preparado estas Tostas.
COCINA TRADICIONAL INGREDIENTES:
Tostas:
- 4 Rebanadas de un buen pan
- 1 Tomate grande maduro
- 150 gr. de Queso Feta
- Aceite de Oliva Virgen Extra
- Sal
- 4 Tomates Deshidratados
- 1 Puñado de Hojas de Albahaca
- 2 Dientes de Ajo
- 1 Cucharadita de Orégano
- 1 Cucharada de Piñones
- Aceite de Oliva Virgen Extra
ELABORACIÓN:
- Cortar a trocitos los tomates secos, el ajo y la albahaca. Introducir estos ingredientes ya cortados en el Herbstick de Lékué. Añadir el orégano, los piñones y terminar de rellenar con aceite. Asegurarse de que todo queda repartido de forma homogénea y meter en el congelador.
- Para las tostas, cortar en daditos pequeños el tomate, aliñar con aceite y sal y repartir por las rebanadas de pan ya tostado. Después desmigar el queso feta por encima y con ayuda de un rallador, rallar el pesto que hemos preparado y tendremos congelado y cubrir la superficie de la tosta.
Bon Appétit!