Tozudez

Publicado el 25 noviembre 2014 por Torrens

La U.E. sigue dando con profusión razones de peso para desear fervientemente haber nacido en uno de los países europeos que han superado la crisis sobradamente, sin fragilidades y van bien, es decir, los que tienen la inmensa suerte de no formar parte de la Unión Estúpida, aunque se trate de Islandia, que en el 2008 sufrió el peor batacazo después del de Grecia. 

A pesar de que fuera de Alemania y de la U.E. quedan pocos expertos que no hayan llegado a la conclusión de que Merkel y compañía se han vuelto locos, ellos siguen con su obsesión y fe ciega en que la austeridad a lo bestia y sin más que nos han impuesto acabará dando resultados, y mantienen su postura a pesar que las medidas estúpidas están afectando ya a la propia Alemania que ha visto caer sus exportaciones y su crecimiento en los últimos meses. De hecho, si dentro de unos años se recogiesen los frutos de esta locura en forma de fuerte creación y distribución de riqueza, sería discutible que hubiese valido la pena teniendo en cuenta el inmenso sacrificio por el que están pasando millones de europeos, y que los mismos objetivos pueden alcanzarse por medios mucho más rápidos y menos dolorosos.

Desde que Frau Merkel empezó a imponer las medidas estúpidas allí por el 2010 he estado pensando cual podría ser la razón de tal suicidio, inicialmente pensé que quería partir la Eurozona en dos, norte y sur, después consideré que era una razón ideológica, pero ahora resulta que en plena fase de malos resultados de las medidas estúpidas en la propia Alemania, buena parte del país tanto expertos como ciudadanos parecen apoyar el suicidio, y ya no entiendo nada.

Es probable que la razón como siempre no sea una sino varias, que podrían ser primero la obsesión germana con la inflación consecuencia de la hiperinflación que sufrió el país en la primera mitad de los años 20, cuando algunos alemanes empapelaron habitaciones con billetes de banco porque resultaba más barato que hacerlo con papel para paredes, y que acabó con medidas de gran austeridad que equilibraron el valor de la moneda, es decir, que al contrario que el resto de países, sobre todo que los USA, los alemanes ya estaban en grave crisis por culpa de las compensaciones del Tratado de Versalles que dio fin a la I Guerra Mundial, antes de que estallase la crisis del 1929, y encima solucionaron ambas crisis sin aplicar, como en los USA los métodos propuestos por Keynes basados en la inversión pública, sino mediante políticas de austeridad. También debe influir la simpatía que tienen los alemanes, al menos los que eran occidentales, por el liberalismo económico a su máximo nivel, porque es lo que, junto con su gran esfuerzo, les sacó de la miseria después de la II Guerra Mundial, y también es probable que los alemanes, a pesar de sus grandes capacidades, hayan cometido el gran error de creer que las medidas que solucionaron su problema creado por la financiación de los inmensos costes de su reunificación en los años 90 van a solucionar ahora el problema de toda la U.E. a pesar que la situación ha cambiado radicalmente.

Hace tiempo que mantengo que todos los países europeos que tienen la gran suerte de no formar parte de la U.E. han superado la crisis con relativa facilidad y hoy día están mil veces mejor que el más eficaz en salir de la crisis dentro de la U.E., que no es la España de Rajoy y el PP sino el Reino Unido.

Para que tengáis una idea de lo desastrosa que resulta para los países comunitarios su comparación con los que no forman parte de la U.E. solo hace falta conocer el caso de Islandia, que aunque es un país pequeño en población, sus habitantes no alcanzan al medio millón, suponen un ejemplo de superación de una tremenda crisis que dentro de la U.E. con las medidas estúpidas habría sido absolutamente imposible y hoy serían la Grecia del norte.

En la época de expansión del liberalismo salvaje los banqueros islandeses se volvieron locos y empezaron a ofrecer instrumentos financieros de altísima rentabilidad en toda Europa, y cuando en el 2008 se inició la crisis todos los bancos quebraron, y cuando digo todos fueron todos, pero no se les rescató sino que fueron intervenidos y buena parte de sus cúpulas directivas acabaron en la cárcel. La crisis dejó al país en una situación similar a la de Grecia. El presidente islandés Ragnar Grimmson explica lo que hicieron para superar la situación de la siguiente forma: “Fuimos lo suficientemente inteligentes para no seguir la ortodoxia del mundo financiero occidental de los últimos 30 años. Establecimos controles monetarios, dejamos caer a los bancos sin invertir dinero público en su rescate, perdonamos a los ciudadanos deudores de los bancos una buena parte de sus deudas, y sobre todo no usamos las medidas de austeridad que se imponen en Europa”, es decir hicieron algo diametralmente opuesto a las medidas estúpidas, y gracias a ello, en el 2013 el PIB islandés aumentó el 3,5%, más del doble de la cifra prevista para España el 2014 que tan orgulloso tiene a Rajoy y tan contenta a Merkel, y el desempleo, que el gobierno islandés considera que tiene que bajar más todavía, está en el 4%, cifra que tiene que multiplicarse por 6 para alcanzar la española.

Pero hay también razones para largarse que no tienen que ver con la economía:

El Parlamento Europeo ha concedido a Sociedad Civil Catalana un premio de la U.E. El hecho de que alguna asociación sea contraria o favorable al independentismo no debe ser obstáculo para que la U.E. le conceda un premio si realmente se lo merece, pero esta distinción es otra demostración de que en la U.E. son capaces de contradecirse cuando todavía no han acabado de hablar porque el premio se basa en los esfuerzos de SCC por mejorar la integración de la sociedad, y se lo conceden a una institución que se opone de manera furibunda a que los catalanes voten y se conozca de una vez el tamaño del movimiento independentista, que mienten descaradamente, incluso en los cálculos técnicos, cuando estiman el número de participantes en manifestaciones, deshinchando las  de independentistas e hinchando exageradamente las que ellos organizan, que siguen mintiendo cuando se añaden a los que aseguran que en España no se podía autorizar el referéndum de la misma forma que lo hicieron en el Reino Unido, y que se gastan fortunas en sus campañas contra el derecho a decidir, que nadie sabe de dónde salen porque, al contrario que la ANC, nunca han hecho públicas sus cifras, aunque una buena explicación del origen de sus fondos quizás sea el que quien presentó su candidatura al premio y la ha apoyado y promocionado en la Eurocámara es el PP. Además ¿no habíamos quedado que en el asunto de la independencia de Catalunya la U.E. no se mojaba y era estrictamente neutral?. Lo dicho, se contradicen ya antes de cerrar la boca.

Otra prueba reciente de lo desastroso de la U.E. también se ha dado en la Eurocámara, donde los partidos ultras UKIP de Nigel Farage y Frente Nacional Francés de Marine Le Pen, presentaron una moción de censura contra el recién nombrado Jean-Claude Junkers, moción que no prosperó porque votaron en contra Conservadores, socialistas y liberales que además expresaron su apoyo a Junkers en el asunto Luxleaks. Es decir, los representantes de la mayor parte de los ciudadanos europeos en la Eurocámara están encantados con que el señor Junkers nos tomase el pelo a todos y nos robase legalmente miles de millones con la complicidad de un montón de grandes multinacionales. Encima resulta que muchos políticos y periodistas están preocupadísimos porque los partidos xenófobos como los de Farage y Le Pen están creciendo mucho, cuando la culpa es totalmente suya, en especial de los políticos que no hacen lo que una mayoría de ciudadanos creen que se debería hacer.

Pero hay más. La U.E. se ha apresurado a apuntarse con entusiasmo a una campaña de la ONU promovida por la ONG “Girls not Brides” contra el matrimonio forzado de niñas, en la que se denuncia que quince millones de niñas son obligadas a casarse anualmente, lo que supone un promedio de 41.000 al día, y en la que se insta a gobernantes y líderes religiosos a acabar con esta bárbara práctica, pero resulta que ni en el manifestó de la ONU ni en el de la U.E., y me imagino que tampoco en el de la ONG, se menciona el hecho de que la mayoría de estas niñas casadas a la fuerza, por no decir todas, son de países y religión musulmana porque el Corán no solo no prohíbe sino que aconseja esta barbaridad en base a que Mahoma se casó con una niña de 6 años. Son tan tontos que pretenden acabar con una salvajada sin señalar a los claros responsables. Os adjunto un archivo Power Point sobre una boda de niñas multitudinaria en Gaza que hace años me mandó un amigo y que da bastantes datos sobre el tratamiento de las bodas de niñas por el Islam antiguo y el actual, aunque tratándose de Palestina es muy probable que los responsables de esta barbaridad también sean, como siempre, los israelitas. Que nadie haya denunciado nunca las bárbaras bodas forzadas de niñas practicadas por el Islam es muy grave, pero que grandes instituciones internacionales denuncien dichas bodas sin ni tan solo mencionar el Islam, aparte preocupante es otra demostración de que los occidentales somos burros perdidos, y por supuesto que el cuidado exquisito que tenemos con el Islam lo acabaremos pagando muy caro.

Seguro que en la U.E. han cometido más estupideces, pero aquí me paro.

Por uno de los grandes misterios de la informática el Power Point no se abre al hacer clic sobre él. Al hacer clic os dejará escoger donde guardarlo, y una vez archivado lo podreis leer, y despues de hacerlo podeis borralo si quereis.  Gaza casamiento