Trabajadores de Michigan, cuna del sindicalismo en Estados Unidos, intentarán hasta 2014 a través de un referendum revocar la ley antisindical "Derecho al trabajo" de reciente aprobación, para hacerlo necesitarán reunir más de 200 mil firmas, las elecciones estatales sería el marco ideal para tal efecto. El presidente Barack Obama ha dicho que esta es una lucha de poderes pues los sindicatos son una fuerza importante para el partido demócrata.