¡Hasta dónde hemos llegado!
Me deja asombrada esta noticia: en Catar denuncian trágicas muertes en la Construcción. Según una investigación sobre la situación laboral cada día de este verano un trabajador nepalés perdió la vida. La mayoría jóvenes y fallecieron tras sufrir paros cardiacos.
Según los datos, los nepaleses afrontan situaciones de explotación y abusos similares a los que hoy día se se considera que es una explotación.
Al menos 44 trabajadores murieron entre el 4 de julio y el 8 de agosto. La mitad sufrió ataques cardiacos o accidentes laborales.
“Nos gustaría marcharnos, pero la compañía no nos deja” dijo un nepalés empleado en Lusail City, una ciudad donde se construye un estado para 90.000 personas que albergará la final.
Los hombres que trabajan en la industria de la construcción en Catar viven en terribles condiciones. Trabajan con el estomago vacío durante 24 horas y si se quejan de la situación, el jefe les agrede y se niega a pagarles el sueldo. Y terminan mendigando para llevarse comida la boca.
Sinceramente me parece increíble. Leer esta noticia me deja sin palabras. Que a estas alturas lleguemos a esto. Después de leer esta noticia, si fuese aficionada al futbol se me quitarían las ganas de ver el Mundial de futbol que se celebrará en el 2022.
Los triste del caso, es que aunque ahora se haga algo al respecto, esas 44 personas fallecidas no van a volver y ¿Qué va a ser de su familia? ¿Hay derecho que te tengan trabajando hasta mueras?
Me parece bien, que para ganarte algo lo consigas con “el sudor de la frente”, pero NADIE se merece esas condiciones tan nefastas. No necesito, viajar para ver cómo está el mundo. Leyendo esta noticia me puedo imaginar muchas cosas. Y me doy cuenta de lo mal que está el mundo. Y me doy cuenta que está mucho peor de lo que yo pensaba.
Hace poco en Londres también falleció un becario, a consecuencia de estar trabajando, de “Sol a luna”, sin parar.
Al final la crisis, nos va a terminar por matar, o matarnos entre nosotros.
¡Pobres familias! Es lo único que puedo decir. Espero que esas empresas y jefes paguen por lo que han hecho. ¡Qué fácil sale matar a una persona!