AÑO: 2019GÉNERO: Cómic
"1664. Reino de Inglaterra. Un equipo de científicos de la Royal Geographic Society ha llevado a cabo una expedición hacia la Península del Yucatán para capturar una criatura que puede convertirse en un arma poderosa en futuras guerras, pero esta criatura no se dejará capturar y sembrará el caos donde quiera que vaya...".
Un cómic que proponga aventuras a la vieja usanza, con viajes a tierras exóticas, criaturas fantásticas y su pequeña dosis de romance, además de mosquetes humeantes y aceros desenvainados, siempre resulta atractivo. Sin olvidar que Yermo Ediciones suele ser sinónimo de publicaciones de calidad, buenos guionistas europeos y que este, concretamente, era un cómic guionizado e ilustrado por españoles: David Muñoz y Tirso Cons. Finalmente, de Muñoz no había leído nada, pero sí había tenido la oportunidad de apreciar el arte de Tirso en "Las crónicas de Legión" y recordaba la calidad de sus lápices. Con todos esos alicientes en el zurrón, no dudé en hacerme con la serie "Trackers".
"Trackers", que parte de una idea primigenia de Tirso desarrollada, posteriormente, en colaboración con Muñoz, nos sitúa pasada la segunda mitad del siglo XVII, en pleno conflicto colonial entre ingleses y neerlandeses como telón de fondo, y con la Royal Geographic Society llevando a cabo una arriesgada misión que tiene por objetivo conseguir una poderosa arma que decante la guerra a favor de los británicos. Esa expedición, vestida con ropajes de científica, pero que, en realidad, tiene más de político-militar que otra cosa, trasladará a los protagonistas hasta la Península del Yucatán para intentar localizar y obtener el arma de los dioses... algo tan poderoso y desconocido que podría cambiar, no solamente el devenir de esa guerra, sino también la historia de la humanidad.
Sin duda alguna es un punto de partida que, aunque no sea del todo original, puede llevarnos a recorrer terrenos muy atractivos desde el plano narrativo y visual. Al fin y al cabo, los británicos y sus expediciones científicas, la cultura maya, los paisajes rebosantes de exuberante vegetación, las escenas marítimas, el choque de intereses políticos y militares y la promesa de una legendaria criatura mitológica son ingredientes suficientes para elaborar un guión sólido. Si a eso le sumamos que siempre acaban apareciendo actores inesperados en escena y que algunas viejas rencillas volverán a aflorar, podría pensarse que "Trackers" tiene motivos de sobra para abrirse camino entre los tópicos que tanto abundan en las películas, libros y cómics de aventuras de corte más clásico... pero no es así. Y tampoco es así a la hora de presentar y dotar de trasfondo a los distintos personajes que pueblan sus páginas.
Ojo, eso no quiere decir que "Trackers" no resulte interesante, es más, sí posee esa capacidad de mantenerte enganchado a la espera de resolver las diferentes historias que van gestándose, pero se echa de menos una mayor dedicación a determinados personajes -algunos bastante carismáticos demandaban más atención- o profundizar en algunas de las subtramas que solamente se acarician de manera superficial. Con todo, estamos ante un cómic entretenido que, a pesar de pecar de cierta previsibilidad, funciona bien y cumple con su cometido, apoyado en sus pinceladas de fantasía y gracias a un apartado visual sensacional y muy disfrutable
El regusto que te queda con "Trackers" es de oportunidad perdida, de tener entre manos una idea con un recorrido brutal, pero que ha terminado conformándose con ser un buen trabajo sin más. La sensación que me ha dejado cada uno de los tres álbumes que componen la serie es de lo que pudo ser y no fue porque hay veces en las que parece que va a dar el salto que se le intuye, el giro que podría esconderse al pasar página y la fuerza que ciertos personajes serían capaces de desplegar... pero esos momentos no llegan y solamente ofrece pasajes concretos y puntuales de brillantez. El final del primer álbum -El arma perdida de los dioses- abría un abanico de posibilidades para que la historia y sus protagonistas maduraran y evolucionaran, pero el desarrollo, en mi opinión, termina siendo irregular. Así, aunque "Trackers" es un cómic honesto y bien resuelto, carece de ese "algo" que le permitiría brillar por encima de la media.
Volviendo al apartado gráfico, el trabajo de Tirso Cons es una barbaridad, destacando especialmente en cuanto a paisajes y ambientación histórica (vestuario, peinados, armas, etc.), sin olvidar las escenas que tienen lugar en mar abierto y algunas láminas que llegan a ser realmente espectaculares. La luz, la paleta de colores elegida para cada lugar o momento y la composición de las páginas encumbran el trabajo del pontevedrés; solamente hay que fijarse en las portadas de los tres álbumes de "Trackers" para hacerse una idea de lo que Tirso es capaz de ofrecer.
Quizá un cuarto álbum que cerrara este -parece que primer- ciclo le hubiera venido muy bien a "Trackers" para desplegar ese potencial latente y hurgar algo más en el pasado de algunos personajes o para explicar mejor algunas de esas pequeñas historias que van abriéndose en paralelo a la trama principal. Concluyo afirmando que Tirso Cons y David Muñoz han creado una serie de ritmo trepidante que gustará a los amantes de las aventuras en paraísos perdidos y que, estoy seguro, tendrá en la figura del Capitán Rodrigo a uno de sus personajes favoritos.
VALORACIÓN: 7'5/10