La entrenadora de nado sincronizado de España Ana Tarrés fue destituida de su cargo por las denuncias realizadas por sus propias nadadoras, luego que se conociera públicamente el agravio a la que estaban siendo sometidas.
“Esto es una dictadura y yo soy la dictadora”. “Trágate tu vómito que aún queda una hora y media de entrenamiento. O te vas a tu casa y no vuelvas”. “No mereces la medalla, no has hecho nada por conseguirla”. “Eres inferior al resto”. Estas son algunas de las frases que contaron las chicas que su entrenadora les propiciaba en todo momento.
Unas quince nadadoras redactaron una carta que presentaron ante la Federación de Nado de España para que fuese expulsada de inmediato la entrenadora.
Según la carta, Tarrés decía cosas como “no te hagas la estrecha si te has follado a todo lo que se mueve” (a una chica de 14 años en medio de un entrenamiento), “fuera del agua gorda, vete al psicólogo” (cuando la nadadora, que desconocía el catalán, le pidió que le hablara en castellano) o “habrás quedado bien en figuras pero con lo gorda que estás no puedo desfigurar el equipo” (a una joven de 1,75m. y 57kg. que luego se volvió bulímica).
Si bien a Tarrés la abalan 15 años de trayectoria y 55 medallas, no se discute el fin que justifique el medio en este caso.
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