La tierra que un día soñó Ali Jinnah. La tierra del Panyab, Afgania, Cachemira, Sind y Baluchistán. Una tierra laica donde convivir en paz y armonía. Una tierra, Pakistán, convertida en una maldición donde ratas asesinas disparan tiros en la cabeza a niños desarmados.
Tremendo, lo de Peshawar. Tremendo