Tanto Juanma como yo llegabamos en condiciones parecidas, ambos con dolorcillos en las rodillas, ambos fuera de forma tras descansar del Titan (que cerraba la temporada de triatlon) y ambos con la mentalidad del que va a salir a rodar 40 minutillos (error)
Llegamos a la salida con el tiempo justo (tema madrugón) y cuando ibamos a empezar nos enteramos de que va a haber un sistema de grupos, hay 3 grupos cada uno con una persona que marca el ritmo y al que no se le puede adelantar. Nosotros miramos los grupos y decidimos meternos en el 2º, tras hablar con el guía que nos dice que no va a ir muy rápido. Nada mas salir nos damos cuenta de que va a un ritmo muy alto y que ni de coña vamos a aguantar así 55 kms. A mi me gusta ir a mi bola, aparte veo que vamos a reventar si estamos mucho tiempo con el grupo, por otro lado si te descolgabas te quedabas totalmente solo para lo que restaba de día, puffffffff. Tras unos 13 kilometros con el grupo decidimos parar y empezar a caminar, que era en principio lo que habiamos previsto. Somos especialmente malos caminando, la gente va a ritmo y nosotros de paseo. en este tramo, nos pasa un biker, -Emiliano!!!! un conocido que nos acompaña un par de kilometros. Así llegamos al avituallamiento, quedaba poca cosa la verdad y como por detras venía el tercer grupo, pues nos daba reparo coger mucho, una barrita y un vasito de agua. La prueba esta catalogada como de autosuficiencia, asi que palante con nuestras barritas, bocatitas y powerade que llevabamos en nuestras mochilas, luego casi nos quedamos sin agua, tuvimos suerte y encontramos algo por el camino. A estas alturas km 20 aprox. ya habiamos petado los dos, como podiamos ibamos avanzado, algunos tramos corriendo y otros andando, hasta el siguiente avituallamiento subimos dos buenos cuestones, andando claro. Al llegar a Castiblanco nos encontramos con el 2º avituallamiento, allí nos sentamos un rato, descansamos, estiramos y nos alimentamos con nuestros bocadillos. El dolor de piernas es bestial y estamos anquilosados, las patas como palos. Aquí conocimos a Rafael, que estaba pensando en retirarse (llevaba una hora allí parado) pero que al ver que nosotros ibamos tranquilitos decide unirse y continuar. Rafael es un experto en ultrafondo y nos da muchisima información sobre los 101 de Ronda y demas pruebas que se realizan en España, la verdad es que nos viene genial su compañía pues hay muchas cosas que no tenemos ni idea. Igualmente combinamos correr y andar. A falta de unos 10 kms, yo que me había adelantado un poco me encuentro con un toro en mitad del camino y mirandome, los que me conocéis sabéis lo jiñao que soy con los animales. Menos mal que venía Rafael, coge un palo y un par de piedras, yo hago lo mismo, y tira en dirección al animal, el toro se da la vuelta y poco a poco se aparta del camino. Juanma tampoco hizo gala de mucha valentía, todo hay que decirlo (no soy el único jiñataman). Y así, como pudimos nos presentamos en meta, mas que sin fuerzas con las piernas muy doloridas y agarrotadas. Allí duchazo en condiciones, paella, bocatas, refresquitos, charlita con los makinas, masajito y mucha risita de apajarao total. Todo perfecto y de agradecer. La organización de 10 y mas siendo la primera vez, solo algo mas de cantidad en los avituallamientos.Lo mejor de todo que aguantaron bien las rodillas y que parece que están totalmente recuperadas. Conocer a gente como Rafael y encontrarnos con algunos conocidos. Desde el domingo nuestro concepto de tirada larga ha cambiado.Ultrasaludos a todos (no iba a escribir cronica y ya ves)
Mil gracias