Ante mi asombro, oigo retumbar al Genio de Rotterdam, Ferry Corsten, retumbando ante 15.000 espectadores. Como ya conté en el post del Trance perdido, prácticamente todo el mundo disfrutará de la canción sin atribuir su autoría. Principal problema del Trance en España. Merece un poco de justicia este hombre, con esta canción, en este país.
Pero no acaba aquí la historia. A apenas 30" para el final del partido, Messina pide un tiempo muerto doble. Más de dos minutos. Los cuales los pasé escuchando el Lethal Industry, de ese Dios pagano del Breda, el otrora gigante del Trance...
Tiësto hace su aparición, buscando un subidón en el público para llevar al conjunto blanco en volandas hacía la victoria (qué épico). La cual acabó logrando, por cierto. El nuevo emplazamiento del basket merengue está levantando controversias, pero desde luego el Dj del recinto tiene un gusto excepcional. Esperemos que B-Face, oriundo del mismo Villaverde, no tenga nada que ver.