Durante el nacimiento de Moldova como país luego de la caída de la Unión Soviética la región conocida como Transnistria en la frontera con Ucrania se encuentra aún disputando su autonomía y reconocimiento oficial de país por parte de las Naciones Unidas.
Actualmente la zona puede ser visitada con normalidad aunque tomando en cuenta de que no hay ninguna representación exterior que sirva de marco legal en caso de tener problemas para salir o por algún problema interno que se presente.
¿Cómo llegar a Transnistria?
La mejor y más rápida manera de llegar a Transnistria es desde la capital de Moldavia, Chisinau. En la estación central de bus (Gara Centrala), ubicada frente al mercado central de Chisinau salen minibuses cada media hora hacia Tiraspol pasando por Bender.
Los minibuses se encuentran estacionados en la parte trasera de la estación por lo que hay que entrar a la misma y al lado de la oficina de tickets encontraremos el bus con el destino indicado en letras latinas y en ruso.
Si bien en teoría los buses tienen un horario de salida este no siempre se respeta y en mi caso esperé aproximadamente una media hora más hasta que el bus se llenó y salió. En la mitad del recorrido el bus tuvo un problema técnico y hubo que esperar una media hora más al siguiente bus. Finalmente luego de unas 3 horas llegué a mi destino, Tiraspol ya que también hay que descontar unos 15 minutos o más de espera en la oficina de migraciones y paradas intermedias.
El ticket cuesta unos 35 Leu lo que es igual a unos 2 dólares por unas 2 horas y media de viaje. Si no se quiere correr riesgos ni pagar sobreprecios se puede comprar el ticket en la oficina de tickets o sino en el mismo bus. En mi caso pagué unos 10 Leu de más arriba del bus.
Control de frontera
El tan temido control de frontera en realidad no resultó ser tan traumático como se decía por algunos sitios de internet. Básicamente si se llega en minibus el control de frontera se realiza antes de llegar al pueblo de Bender, no en Tiraspol. Aquí se deberá bajar del bus y en una oficina de control de pasaportes nos proveerán de una tarjeta con nuestros datos que durará 8 horas. El trámite es muy rápido y casi sin preguntas sólo por cuanto tiempo queremos visitar Transnistria.
Esta tarjeta habrá que cuidarla como si fuese otro pasaporte más ya que si la llegásemos a perder no podremos salir del “país”.
Al salir el control se realiza arriba del minibus por lo que no hace falta baja del minibus. Luego de controlar todos los pasaportes un oficial se llevó el mío lo que me mantuvo en vilo alrededor de 5 minutos que me parecieron una eternidad.
Importante: Para pasaportes europeos generalmente no se requiere visado ni seguro médico ni una suma de dinero determinada para poder ingresar.
Bender
La primer parada importante del bus en el pueblo de Bender, por lo que no hay que confundir con Tiraspol que se encuentra unos kilómetros más alejado. Aquí se puede descender y tomar el siguiente bus que usualmente tienen una frecuencia de una hora, hora y media.
Lo que hay para ver aquí es una fortaleza y un pequeño pueblo por lo que no se demorará más de una hora, tiempo suficiente para el siguiente minibus que sale desde una terminal ubicada a unos metros de la fortaleza.
Tiraspol
El minibus finaliza en la estación de trenes de Tiraspol al otro lado de la ciudad. Aquí se puede cambiar dinero ya que Transnistria usa su propia moneda y no se aceptan LEU en los comercios. Lo ideal es cambiar una cantidad pequeña de efectivo para la supervivencia ya que en Moldova no se acepta este tipo de moneda.
Al salir de la estación por la Lenin Street lo primero que se puede ver es un panorama un poco desolador de una nación aislada sin reconocimiento oficial; edificios antiguos venidos a menos de la ex unión soviética, poca presencia turística, chicos por la calle preguntándome si tenía dólares (similar a los territorios palestinos) y algunos militares por las calles, pero dentro de todo si se toman las precauciones básicas resulta un sitio relativamente seguro y particular para visitar.
Ya siguiendo la ruta hacia el centro por la Lenin Street a unos metros de la estación se puede ver el parque Kirov con su iglesia Presentación Del Niño Jesus.
Por la misma calle a unos 500 metros encontraremos la avenida principal 25 de Octubre, el centro neurálgico y por donde se encuentran la mayoría de los atractivos turísticos que ofrece la ciudad.
- Arquitectura soviética: A lo largo de la avenida 25 de Octubre encontraremos varios edificios gubernamentales aún en servicio de la era soviética. Estos edificios son fácilmente identificables por su escala monumental, la estrella comunista en el techo y la infaltable presencia de Lenin.
- Catedral Metropolitana: Se encuentra sobre la calle Karl Marx en el centro de la ciudad justo a lado de un enorme mercado, por lo que el sitio es bastante transitado durante el día. La catedral, también llamada Iglesia de la Natividad es relativamente nueva, abriendo sus puertas allá por el año 99.
- De Wollant Park: Este parque principal se encuentra a unos metros de la catedral pasando por el monumento a Suvorov rodeado de flameantes banderas de naciones sin reconocimiento oficial. En el parque encontraremos una serie de bustos militares y otros representantes de la historia de la región.
- Memorial de la Gloria: Siguiendo por la avenida 25 de Octubre encontraremos una de las postales de Transnistria; el memorial de la guerra de 1990 – 1992.
- Fortaleza de Tiraspol: Este sitio histórico construido entre los años 1792 y 1793 está ubicado al final de la avenida 25 de Octubre y básicamente lo que se puede ver aquí es un museo de la antigua ciudadela con objetos de la época.
- Río Dniester: Este es uno de los ríos más importantes de la región, cumpliendo también el rol de frontera natural entre Transnistria y Ucrania.