Transplante de árboles en invierno

Por Jardindeladocta

Llega el invierno y con él, el momento justo para efectuar la plantación de todos aquellos árboles a raíz desnuda de hoja caduca como los frutales. También se puede efectuar el transplante de otras especies que en los viveros se encuentran plantadas en terrones, teniendo especial cuidado de que este terrón no se rompa en el momento del transplante, de ser así, es muy probable que al entrar aire a las raíces el transplante fracase y el árbol muera . También pueden ser transplantados en esta época los árboles que se serán utilizados como cortinas de viento como por ejemplo las diferentes especies de álamos.
¿Que debemos hacer antes de plantar un árbol?
Antes que nada debemos realizar un análisis detallado del lugar donde colocaremos el árbol y las características que éste tendrá en su etapa adulta. Por ejemplo, no colocar especies de gran porte cerca de veredas, medianeras, muros o desagües; no colocar árboles de hoja caduca o de gran producción de frutos o flores cerca de piletas, etc. Si queremos sombra durante el verano y sol durante el invierno debemos escoger especies de hoja caduca (roble, fresno, crespón, liquidambar, tilo, olmo, catalpa, ginko, lapacho,etc) mientras que si queremos sombra durante todo el año lo mejor será elegir árboles de hoja persistente ( siempre verde, magnolia, ficus, roble sedoso, aromo, etc). La mala elección del árbol simplemente hará que debamos quitarlo años mas tarde.
Luego debemos trabajar y acondicionar el sitio de plantación. A continuación debemos cavar un hoyo del tamaño adecuado para la especie seleccionada. El tamaño del hoyo debe ser como mínimo el doble del tamaño del pan de tierra del terrón. En el caso de los árboles a raíz desnuda la raíz debe quedar holgada dentro del hoyo. Luego de colocar la raíz o el terrón, rellenar el hoyo con tierra preparada con buen contenido de materia orgánica asegurándonos que el cuello de la planta quede a la altura del suelo. realizar una "cazuela" alrededor del tronco de modo que el agua quede contenida en la misma. Apisonar bien la tierra de modo de eliminar todo el aire que pudiera existir. A continuación regar abundantemente. Es importante que en los meses posteriores al transplante el riego sea abundante y al pie del árbol. De esta manera la raíz profundizará logrando mayor firmeza y no provocará efectos perjudiciales en la superficie. 
El conocimiento de las mejores condiciones de suelo, temperatura, iluminación que le corresponden a cada especie, es lo que nos asegurará el correcto desarrollo del árbol.