Tras la fiesta por el bicampeonato, otra victoria de Vettel en Corea y segundo mundial de constructores para Red Bull

Publicado el 16 octubre 2011 por Toni_delgado @ToniDelgadoG

Vettel logró su décima victoria del curso - EFE.

Las fiestas, las celebraciones y los bailes no son la mejor rutina para preparar un gran premio, pero son los premios, los momentos de desconexión merecidos para un campeón. Para un piloto que no se despista ni tras lograr su segundo título mundial. Siete días después de que reeditará su corona mundial en Suzuka Sebastian Vettel también ganó en el circuito de Yeongam (Corea del Sur), con lo que sumó la décima victoria de la temporada. El alemán está decidido a igualar las 13 victorias en un curso de Michael Schumacher, al que siempre ha admirado. Precisamente un accidente de Schumi -Vitaly Petrov le destrozó el alerón trasero y el alemán tuvo que abandonar- pudo cambiar la carrera con el coche de seguridad. Pero no: "Después de la segunda parada he acelerado y bajado el ritmo cuando lo necesitaba". "[El RB7] es un coche muy fácil de pilotar", dijo Vettel, muy satisfecho también con el tercer puesto de su compañero Mark Webber, con el que Red Bull se aseguró su segundo campeonato mundial de constructores. La escudería de referencia actual. Lewis Hamilton fue segundo, seguido por Jenson Button y los dos Ferrari, Fernando Alonso y Felipe Massa. Jaime Alguersuari igualó su mejor posición histórica, el séptimo puesto de Monza adelantando en la última vuelta a Nico Rosberg: "Lo he dado todo, he puesto el DRS y he tenido el espacio suficiente para superarle".
Dso mundos separan a Vettel de Alguersuari, que se disculpó ante el alemán por haberle obstaculizado en los entrenamientos libres del sábado. El catalán -"hemos mejorado, sobre todo en aerodinámica"- aspira a superar a Sauber, como dijo, y a su vecino, Buemi, como se calló. Mientras que Vettel, insaciable, juega para equipararse con Schumacher y lo logrará si gana en las tres carreras que quedan (India, Abu Dabi y Brasil). En Corea del Sur Baby Schumi se puso las pilas y en sólo cuatro giros se puso primero tras arrebatarle la plaza a Hamilton, que había sido el único capaz de quitarle la pole a los Red Bull.
En la salida pasó tanto (o más) que en algunas carreras. Alonso, vencedor del GP de Corea el año pasado, se uso en pararelo con Massa, que lejos de acongajarse superó a Button y a Webber, que replicó al brasileño. Adrenalina para empezar una carrera con el campeón ya decidido, un detalle para el espectador madrugador. Button se acercaba a Alonso, que clavaba los frenos, incómodo en el tramo inicial con su 150º, en el que probó un alerón del próximo monoplaza. A Massa, que llevaba un coche similar al de Japón, sólo le pudo adelantar después del segundo pit stop. Ahí mejoró el ritmo del bicampeón español, que firmó algunas vueltas rápidas, pero que no pudo dar alcance a su principal adversario por el subcampeonato, Button. "Renuncio, no puedo", dijo el asturiano por radio a dos vueltas para el final. Cuatro antes Webber había perdido el segundo puesto en beneficio de Hamilton. Resultó una lucha de DRS. El impulso definitivo para Alguersuari, que llegó a rodar tercero antes de sus dos visitas a boxes. En Toro Rosso se equivocaron haciendo entrar antes a Buemi. ¿De ser así hubiese acabado mejor? "No creo", respondió Alguersuari.