Tres bandas y un destino

Por David Gallardo @mercadeopop

Kitai, Veintiuno y Playa Cuberris. Tres jóvenes bandas en claro ascenso que tenían por delante un 2020 de lo más jugoso. Pero no pudo ser y se convirtió en una cuestión de supervivencia.

Todo el mundo está sufriendo mucho en este aciago año pandémico, pero hablemos en particular de esas bandas jóvenes que trabajan sin parar para hacerse un hueco en nuestra memoria colectiva. Kitai, Veintiuno y Playa Cuberris son tres de ellas y, tras años de incesante y duro trabajo, 2020 tenía que ser algún tipo de punto de inflexión, de salto exponencial.

Planeaban sacar discos y tocar en más sitios y para aún más gente. Los sacaron, vale, pero nada salió según lo planeado. Y si estar en una banda ya es de por sí una cuestión a vida o muerte, 2020 llegó para ponerles a prueba. A ellos y a nosotros. Para probarnos a todos. Sobre el pasado reciente, el presente desconcertante y el futuro inmediato charlamos distendidos en una de tantas videollamadas. Vamos allá.

Os sigo desde siempre y hemos hablado muchas veces. Yo creo que 2020 era un año perfecto para que todo se multiplicara. Tenía que pasar algo más gordo aún, un verdadero punto de inflexión en 2020 para las tres bandas. Pero en estas nos vemos.
Pedro: Hemos tocado lo que hemos podido. Kitai ha sacado 'Mixtape', Veintiuno el single 'Caramelo' y nosotros nuestro disco ' Gigantes '. Todo en el peor momento, es verdad. Somos bandas que nos conocemos desde hace años, seguimos una estela parecida y nos tenemos cariño y estima.

Diego: Mucho. El desarrollo de las tres bandas ha sido muy parecido. Con Kitai hemos coincidido mil veces.

Pedro: Vosotros más.

Diego: Sí, y a vosotros os escuché mucho antes de conocernos en persona.

Diego: Tal cual. Es el momento de aguantar. Kitai es la banda que más nos ha inspirado a currar, lo diré mil veces. A nosotros nos alienta ver que la gente no se rinde. Cuando llevamos en la brecha tantos años currando, llega un momento así y o juegas la pelota con lo que haya o te encoges con las rodillas en la cabeza y a llorar. Fue duro los primeros quince días, pero o lo normalizas o te tiras todo el tiempo llorando por un año que ya no existe. Llevamos desde marzo sabiendo que el mundo es otro. Nosotros hemos girado este verano y lo haces para gente sentada y con mascarilla. Es otra peli, pero hay que vivir en esa peli.

Pues Playa Cuberris teníais, de hecho, dos fechas ahora en noviembre que se acaban de aplazar. Finalmente serán el 20 de febrero en el Loco Club de Valencia y el día 21 en La Riviera madrileña...
Pedro
: Es que es verdad que todo tiene que ver con la incertidumbre que dice Diego. Estás supeditado a la voz de última hora y a que de repente se haga un confinamiento o se cierre la ciudad, porque también hay gente que se acerca desde otras localidades. Estamos siempre esperando hasta el último después de dar de alta a la gente que va a trabajar, haber hecho una campaña de promoción... hablamos de mucho dinero. Y las bandas no estamos generando todo el negocio que podríamos generar, pero estamos invirtiendo en nuestra comunicación un montón de pasta que puede ir a un pozo sin fondo.

Diego: Y el ministro de Cultura que no tenía ni idea. Me consta que cuando se ha reunido con gente del sector y le han presentado las demandas de Alerta Roja, el problema es que no tenía ni puta idea de lo que le decían.

Álex: A título personal, este año me ha abierto los ojos para saber por qué estoy haciendo esto, cuál es el fin y el motivo, para saber qué es lo que quiero hacer en la vida. Y la verdad es que es una pena que a los políticos no les importe la cultura pero a mi no me sorprende, porque nunca les ha importado. Yo llevo ocho años peleando para que mejoren las cosas en las salas de conciertos y no me han hecho ningún caso. Y también pienso que desde lo público no se hace nada, y desde el ámbito privado es una mafia increíble, está todo atado de cabo a rabo, incluso se ha visto este verano descaradamente cómo se han repartido lo poco que había. Que han tocado unos pocos en todas partes. Yo me quiero centrar en hacer canciones, en la música, y esta pandemia me ha abierto los ojos a mí en ese sentido.

Pues entonces hablemos de planes. ¿Hay planes por delante o me estoy pasando de flipado?
Álex
: Nosotros hicimos el concierto de presentación en Moby Dick en octubre y a la semana siguiente la cerraron, ya ves. Lo que vamos a hacer es seguir trabajando, haciendo canciones. Diego lo ha dicho muy bien, nosotros no hemos parado en muchos años y ya lo necesitábamos, aunque nos sienta raro. Teníamos fechas este verano y las hemos tenido que aplazar y, mientras tanto, seguimos en fase de composición salvo que salga algo puntual. Y luego ya veremos qué pasa.

Diego: A nuestro disco le queda un poco todavía, creo que saldrá para marzo de 2021. Llegamos cinco temas adelantados y vamos a seguir adelantando. Nos pasa como a Kitai, que ellos han sacado 'Mixtape' ahora, pero recuerdo que la mayoría de los temas ya los habían estrenado. Nuestro disco va a correr la misma suerte, vamos a adelantar en formate single hasta un setenta por ciento, porque era la única manera en la que veíamos que no lo íbamos a quemar habiendo empezado en enero a presentar canciones y sin saber cual es el horizonte. Y mientras tanto, a tocar donde se pueda, porque ya te digo que la tasa es que se toca en el sesenta por ciento de los sitios que tienes confirmados porque la mitad se caen. A ver cuándo hay garantías de que se pueda tocar en las salas, porque ellas mismas no saben cuando pueden abrir ni si les compensa con las restricciones que hay.

Álex: Uf, pero la gente... seamos realistas. Tú sabes de corazón que yo defiendo todo esto a capa y espada, pero la gente son como bancos de peces, van detrás de lo que les echan. Por desgracia, lo único que teníamos los músicos que se mantenía intacto era el directo... la gente pasa de comprar discos porque lo tiene todo al alcance de un click. Cuando sueltas una canción, da la sensación de que es como soltar una miga de pan en un océano donde ya hay millones de migas. La miga que destaca no es la que está más buena, sino que depende de quien la lance. Esto va por lo que plantea Pedro del tipo de consumo, porque no puedes convencer a la gente de que consuma de otra manera cuando la están acribillando los que tienen el dinerito con los nuevos géneros musicales que no son de música de bandas.

Diego: Para nosotros todo el dinero venía del directo, totalmente.

Álex: Claro. Y lo que quiero decir es que el directo es lo que nos alimentaba. La gente va a nuestros conciertos. Luego el consumo de música como tal... nosotros hemos sacado 'Mixtape' en casete, igual que Veintiuno por puta casualidad, y lo hemos hecho por nostalgia, no por consumo. ¡Somos unos nostálgicos!

Diego: El formato físico pervive por la nostalgia. El modelo de consumo ni siquiera es una cosa de la música. Si extrapolamos la dinámica de la música, yo quiero que compren mi disco en físico pero pido cosas a Amazon en lugar de en puntos de otro tipo. Es la forma en la que vivimos todos de todas las maneras.

Pedro: El sector se ha reinventado y ha intentado mantenerse como ha podido, mejorando esta parte. Pero la música en directo se concibe para vivir en esa reunión, como dice Diego. Lo otro es un método de supervivencia temporal muy digno que es reflejo de cómo ha tenido que adaptarse la industria cultural por el desamparo que mencionaba antes. Pero lo que no podemos hacer es dejar de lado todos los trabajadores que están en la industria del directo propiamente dicho. Un streaming no es un directo.

Diego: Un streaming no implica ni siquiera la misma cantidad de funciones motoras.

Pedro: Vamos a por 2021, claro que sí. A título personal diré que paradójicamente este año de covid es el que más veces me he subido al escenario, pero no como Playa Cuberris, sino como cantante de bandas de versiones. Porque mientras las salas de Madrid tienen que soportar unas licencias y unos alquileres que les esquilman, las ciudades del extrarradio sí que siguen ofreciendo música en directo en restaurantes y demás, pero no aceptan un producto de canciones de autor, sino que están enfocadas a las versiones. Y yo he sobrevivido cantando Lenny Kravitz y The Who estos meses para financiar a Playa Cuberris, tres veces a la semana, en la sierra noroeste de Madrid.

Diego: Nosotros estamos aguantando y currando mucho. El primer hostión que tuvimos fue de expectativas. No puedes tener expectativas en cuanto a tu curro. Nosotros las teníamos en marzo muy grandes y a partir de entonces ha sido reinventarnos, aguantar y desarrollarnos en la medida de lo posible. No diría que estamos en un buen momento emocional, yo desde luego no lo estoy, y lo que estamos haciendo es huir hacia adelante, currando el doble para conseguir la mitad. Supongo que cuando acabe esto y podamos mirar atrás haremos balance, pero a día de hoy estamos en la guerra.