La familia Droin es una de las más antiguas en Chablis, y sus miembros llevan alrededor de 5 siglos elaborando vinos en la región. Actualmente poseen unas 25 ha de viñedo repartidos entre las AOC Petit Chablis, Chablis, Chablis Premier Cru y Chablis Grand Cru. Desde 2003 controlan el viñedo Premier Cru Mont de Milieu, con viñas de más de 40 años, y del que procede este Jean-Paul & Benoît Droin Chablis Premier Cru Mont de Milieu 2009 (AOC Chablis Premir Cru, blanco con crianza 100% Chardonnay, Jean-Paul & Benoît Droin). Con un 25% del vino fermentado y criado durante unos 10 meses en barrica de roble, tenemos un vino de color amarillo pajizo pálido, con reflejos dorados claro. La nariz es discreta, con cítricos, flores blancas y quizá algo de mantequilla; tras 48 horas con wine-saver se marcan más notas cremosas. En boca tiene una buena acidez, muy bien integrada en el conjunto, con un paso fresco y frutal, dando frutos secos en el retronasal y dejando un final ligeramente amargoso muy agradable. Un vino nada estruendoso, pero bien conjuntado y muy agradable de beber.
Cloudy Bay es una bodega relativamente joven, fundada en 1985 en el valle de Wairau, en Marlborough, al norte de la Isla Sur de Nueva Zelanda. Son socios fundadores del programa New Zealand Integrated Winegrape Production, que busca el desarrollo de programas de cultivo sostenible en los viñedos. Con uvas procedentes de viñedos situados en Rapaura, Fairhall, Renwick y Brancott, en el valle de Wairau, y fermentación en acero inoxidable con control de temperatura, se elabora Cloudy Bay Sauvignon Blanc 2011 (Marlborough, Nueva Zelanda; blanco joven 100% Sauvignon Blanc, Cloudy Bay). El vino tiene un color amarillo muy pálido con reflejos acerados. Nariz comedida, pero muy agradable, con manzana, aromas de campo, herbáceos, flores blancas y puntas cítricas de pomelo. En boca es un vino fresco, con una acidez que está muy presente pero no se marca en exceso, algo glicérico, frutal y con un final muy tenuemente amargoso. Muy rico, no cansa. Muy buen vino.
Schmitges es una pequeña bodega situada en Erden, en la región del Mosela medio, en Alemania. Aunque las primeras referencias de este elaborador se remontan a 1744, es en 1990 cuando se hacen cargo de la bodega Andreas Schmitges y su esposa Waltraud, junto con sus hijos, y hacen resurgir y darse a conocer a la casa. Un trabajo meticuloso en los viñedos, situados en las mejores zonas del Mosela medio (Treppchen y Prälat en Erden, y Sonnenuhr en Whelen) y un delicado proceso de vinificación (vendimia manual, control de temperatura, fermentaciones lentas) hacen que sus vinos vayan ganando adeptos. El Schmitges Riesling Vom Berg Feinherb 2011 (DO Mosel-Saar-Ruwer, blanco joven 100% Riesling, Weingut Schmitges) viste un color amarillo alimonado claro, con reflejos acerados. No es muy intenso en nariz, donde encontramos cítricos, piel de manzana, algo de flor blanca, hinojo y algo como de frutos secos. En boca tiene una entrada dulce, rápidamente diluida por una acidez cítrica muy refrescante; es muy frutal, algo glicérico, y con muy buen final. No es el Riesling más impresionante que he probado, pero se bebe solo.
Tres castas, tres países, y tres muy buenos vinos blancos. Nada explosivos, pero muy elegantes. Agradables tanto para beber solos como para acompañar distintos tipos de comida.