Tres desayunos a evitar por cualquier aficionado al ciclismo

Por Rafael @merkabici

El desayuno es una de las comidas más importantes para las personas, y esto se ha repetido hasta la saciedad así que no insistiremos demasiado en ello: tan solo incluir que después de dormir cerca de entre 6 y 8 horas, el desayuno es la primera comida que ingresa al cuerpo y con ello la energía que se necesita para empezar la jornada. Es frecuente ver a personas que se saltan este paso con toda la tranquilidad del mundo y, hambrientos y fatigados a media mañana, a la típica máquina de comida que, surtida de bollería y otras porquerías, termina por engordar el triple y aportando la mitad que un buen desayuno.

El problema aquí está en saber qué elegir. Para un buen desayuno no hay que dejarse llevar por los envases y la publicidad engañosa. Hay que evitar el queso cremoso y decantarse por otros alimentos más saludables, como el muy mediterráneo aceite de oliva. Con ello no queremos decir que uno deba privarse de un buen dulce, pero sepa elegir cuál. Huya de los muffins y pancakes industriales.  Así pues, ¿qué desayunos debemos evitar?

Cuidado con los cereales. Es increíble, pero es cierto que muchos adultos prefieren un cereal azucarado en la mañana para comenzar el día pensando que están optando por algo “saludable”, cuando realmente ello no es así. Es sencillo servirse un plato con cereales y leche, pero ¿Es lo mejor? No. En este caso es preciso hacer una diferencia, pues hay cereales y cereales, por lo que no siempre nos encontraremos con cereales que aporten al haber opciones que se resumen sólo en azúcar.

Cuando consumimos azúcar se hace realmente difícil perder peso y también el drenar la energía. Si se quiere comer cereal, se puede hacer pero siempre y cuando éste sea rico en fibras y no en azúcar.

La fritanga made in UK. Este desayuno grasoso es conocido en el Reino Unido como el desayuno del peón; el alto contenido calórico que se ingiere nos ayuda a sentirnos mejor, pero por dentro estamos metiéndonos en un gran problema. Consumir salchichas, huevos fritos, manteca, tocino y café es la combinación que precisamente debemos evitar a menos que queramos explotar.

Un desayuno que contenga todo lo anterior puede tener perfectamente 3.000 calorías, pero ¿Gastaremos toda esa ingesta de energía realmente? Si nos vamos a terminar sentados en un escritorio hay que reconocer nos estamos suicidando al ingerir algo como eso. Quienes comen diariamente algo así tienen más opciones de contraer cáncer de colon. Otra opción es no comer más que fruta para compensar el desayuno.

Bollería industrial, muffins y otros dulces nocivos. Normalmente las personas añaden a sus desayunos los típicos Muffins – bollos dulces made in EEUU, aunque ya conocidos en todo el mundo- cuando les toca comer algo rápido. Si hacemos algo así lo que estamos intentando es que nuestro cuerpo arranque bien con una dosis alta de azúcar, lo que nos da potencia al comienzo, pero cae rápidamente.

Si vamos a conversar sobre calorías, tenemos que estar de acuerdo en que no existen los bollos y muffins bajos en grasas, especialmente los hechos a mano en cualquier pastelería. Yo no podría pasar el día sin consumir alguna pieza dulce.