Tres deseos; Jackson Pearce

Publicado el 30 junio 2010 por Niicky.gray

Genio: criatura mágica encargada de servir a sus amos concediéndoles tres deseos.
Genio: aquel que no era tan sólo la critura mágica que él siempre había creído ser.

Empecemos por el principio: los genios ya no son lo que eran. No viven en pequeñas lámparas ni visten turbantes. Viven en Caliban, el mundo de los genios, y pueden ser como tú, como o como, aunque de alguna forma puedes (si te fijas) diferenciarlos de los demás; eso siempre y cuando se dejen ver, porque no se muestran ante cualquiera, sólo ante el amo que los ha invocado al desear algo con todas sus fuerzas, cosa que, en un principio, puede hacerte creer que estás loco... Tal y como le pasa a nuestra protagonista, Viola (un ugh al nombre), cuando ve a Genio por primera vez y se da cuenta de que nadie, absolutamente nadie, repara en la presencia del chico.
Es aquí donde empieza la historia de ambos, un continuo tira y afloja de:
- Pide un deseo.
- Tengo miedo de elegir mal.
Y aun así, aunque tengan que pasar muchas páginas hasta ese primer deseo, aunque se echa de menos algo más de romanticismo, aunque Viola es una de esas protagonistas a las que te entran (en un principio) ganas de abofetear, el libro me ha gustado.
En primer lugar, dedico un gran hurra a la autora al no hacer de Tres deseos una saga, pues parece que últimamente sólo se sabe escribir de estas últimas. Es un libro, es autoconclusivo, y si sacan otra parte desde luego no me la compraré, porque la historia queda más que cerrada en sus casi 300 páginas.
Y para continuar, dedico un gran buf a la Viola del principio, esa a la que sólo le importa formar parte de la Familia Real de su instituto, o sea, los típicos populares de película americana que parecen brillar con luz propia allá donde van (alguien debería decirle a esa chica que es mejor ser querida por pocos que ser conocida por muchos) Menos mal que a medida que pasan las páginas va cambiando de actitud, cosa que se agradece, aunque seguiremos encontrándonos situaciones en las que nos desespera.
En cuanto al otro protagonista de la historia, Genio, debo decir que aunque me ha resultado mucho mas simpático que Viola, he encontrado que le faltaba un algo que no sabría definir. Está trabajado, tiene una forma de ser clara y su evolución es notable a lo largo del libro, pero le falta una chispa de esa sustancia misteriosa que hace que un personaje se cuele para siempre en nuestra memoria.
Con respecto a los secundarios, son sólo eso, secundarios (bastante planos y estereotipados) que no tienen otra función que la de hacer fluir la historia; una historia, por su parte, diferente a lo que estamos acostumbrados: original, sencilla, contada con un ritmo más o menos estable y una escritura sin complicaciones a la que yo personalmente añadiría más descripciones, sin demasiada acción, dulce y, por qué no decirlo, bonita. Perfecta para una tarde sin nada que hacer. No tan perfecta para buscadores de un nuevo boom literario.
Según Niicky se merece...

P.D: Blog oficial de la autora, aquí.
P.D.2: Twitter oficial de la autora, aquí.