1-PRODUCTOS EN LOS QUE SE PUEDE AHORRAR: No es necesario gastarse una fortuna para vernos bien, basta con tener claro en qué cosméticos merece la pena invertir. -Limpiadora facial: No necesitamos hacer un gran desembolso en ella. Buscaremos fórmulas sencillas ya que las que contienen activos antiedad son más caras y permanecen sólo unos segundo sobre la piel para luego eliminarse con agua o con el algodón. Al ser un paso muy rápido no da tiempo a que los activos lleguen a funcionar. Para que limpien solo tienen que llevar poca cantidad de tensioactivo, que emulsiona la suciedad, y algún humectante, como la glicerina, que deja la piel confortable. Si nuestra piel es sensible también pueden ir bien las que tengan activos como la manzanilla; o si es grasa, las que contengan extractos astringentes. -Hidratante de lujo: Hay ingredientes que no hidratan e incrementan mucho el precio de la crema, como el oro o las perlas. A esto se suma el perfume o el envase sofisticado, que también incrementan el precio. -Crema específica para el cuello: Se podría prescindir de ella ya que al fin y al cabo, contiene los mismos activos reafirmantes y tensores que muchas cremas antiedad para el rostro.
1-PRODUCTOS EN LOS QUE SE PUEDE AHORRAR: No es necesario gastarse una fortuna para vernos bien, basta con tener claro en qué cosméticos merece la pena invertir. -Limpiadora facial: No necesitamos hacer un gran desembolso en ella. Buscaremos fórmulas sencillas ya que las que contienen activos antiedad son más caras y permanecen sólo unos segundo sobre la piel para luego eliminarse con agua o con el algodón. Al ser un paso muy rápido no da tiempo a que los activos lleguen a funcionar. Para que limpien solo tienen que llevar poca cantidad de tensioactivo, que emulsiona la suciedad, y algún humectante, como la glicerina, que deja la piel confortable. Si nuestra piel es sensible también pueden ir bien las que tengan activos como la manzanilla; o si es grasa, las que contengan extractos astringentes. -Hidratante de lujo: Hay ingredientes que no hidratan e incrementan mucho el precio de la crema, como el oro o las perlas. A esto se suma el perfume o el envase sofisticado, que también incrementan el precio. -Crema específica para el cuello: Se podría prescindir de ella ya que al fin y al cabo, contiene los mismos activos reafirmantes y tensores que muchas cremas antiedad para el rostro.