Algunos pueden estar rumiando que es un soplo histórico, que cuando grandes series llegan a supostrera etapa deben ser reconocidas, veladas como se merecen, realizar algún tipo de ritual con las herramientas que cada uno tenga a mano y darle el credo que se merecen. Gimotear mientras se rememora sus mejores escenas, vestir de luto por unos días para que luego quede en nuestra memoria para siempre y poder contarles de ellas a nuestros hijos o nietos. Cuando un grande se va queda un espacio vacío…
Yo no creo todo esto, ni Lost, ni 24, ni Damages se merecen esto, mas bien una despedida seca, un borrón y cuenta nueva, esperando que sus colindantes próximos sean realmente de calidad. Se van tres series, tres series más del montón…
LOST
Ya he hablado demasiado de esta serie y parece que no fue en vano, ya que los creadores, sólitos y sin amenazas a cuesta, me dieron la razón con los pésimos capítulos que han emitido de la sexta temporada. Lost es cada vez más infantil, es poco universal, se enreda en sus propios cordones y emisión tras emisión es un gran tropiezo que solo los idiotas fieles y fundamentalistas de la serie no pueden ver ni siquiera sentir. Sus fanáticos se encuentran totalmente alienados por los contenidos de Lost, ven cosas donde no las hay y todavía se siguen inventando historias que esos solos creen, es decir, estos esquizofrénicos televidentes arman su realidad, su serie como mas les plazca y hacen de esa realidad un bello lugar donde habitar sin darse cuenta de la serie de mierda que es Lost.
24
¿Tuvo que durar ocho temporadas? ¿Era necesario? Lo único que tengo para apuntar sobre esta serie es que la han alargado como a ninguna, han creado un gran personaje de Ciencia ficción dentro de una serie policial en donde lo sobrenatural no existe. 24 ya fue hace rato, dejo de ser creíble desde que comenzó su segunda temporada y ya hace un tiempo largo que me gustaría ver muerto a Jack Bauer aunque sea para que los televidentes no crean que el superhombre existe ni que las mujeres piensen que algún Bauer brotará por sus vidas. No señora sin alegrías, Jack Bauer no existe, es tan real como un Power Ranger.
DAMAGES
Como devastar una serie tan solo por el hecho de procurarle continuidad y seguir cobrando unos lindos dolares a costa de la gran popularidad y calidad que tuvo su primera temporada, eso es Damages. Es una inmensa decepción, sus dos novísimas temporadas estuvieron de más pero por suerte algún dueño alcohólico del canal se dio cuenta, cerró la ventana y la boto a la calle. ¡Gracias SR. FX los televidentes se lo agradecemos!