Tronco de fresas con nata. Un postre muy especial dedicado a todas las mamás

Este fin de semana es muy especial porque el domingo es el día de todas las madres y a pesar de que muchos no podamos estar juntos físicamente lo vamos a celebrar con un postre dedicado a todas las mamás . Vayamos con la receta.

Ingredientes:

Para el relleno:

- 200 g de fresas- 400 ml de nata para montar- 100 g de azúcar glas

Para el bizcocho genovés:

- 6 huevos- 150 g de azúcar- 150 g de harina de repostería - la ralladura de un limón- una pizca de sal

Preparación:

Comenzamos preparando el bizcocho, para ello batimos las yemas con el azúcar y la ralladura de limón hasta que blanqueen. En un bol aparte montamos las claras a punto de nieve con la pizca de sal. Tamizamos la harina y mezclamos con las yemas. Añadimos las claras con movimientos envolventes. Extendemos con una espátula sobre una fuente de horno y horneamos a 180ºC unos 10-12 minutos. Cuando los bordes comiencen a dorarse ya estará listo. Dejamos enfriar sobre una rejilla.Mientras se hornea el bizcocho preparamos el relleno. Limpiamos las fresas y las troceamos dejando algunas para la decoración. Montamos la nata muy fría con el azúcar glas. Mezclamos las fresas con la nata montada. Reservamos en el frigorífico.Cuando el bizcocho esté frío rellenamos con la mezcla de nata y fresas extendiéndola por toda la superficie dejando un espacio libre de unos dos centímetros al final. Enrollamos el bizcocho con la ayuda del papel de hornear. Colocamos en una fuente alargada y adornamos con las fresas que habíamos reservado y con un poco de azúcar glas.

Curiosidades:

 Las fresas son plantas rastreras del género Fragaria nombre que hace alusión a su fragancia. Es una fruta cuyas semillas se encuentran en el exterior del fruto y cuyo valor energético es muy bajo. Nutricionalmente destaca su contenido en vitamina C, antocianinas y ácidos orgánicos. Su contenido en vitamina C es superior al de la naranja. En cuanto a los ácidos orgánicos, contiene ácido cítrico, málico, oxálico y salicílico en menor proporción. Las fresas deben su color a sus pigmentos vegetales o flavonoides, en concreto las antocianinas que confieren a las fresas junto a la vitamina C y a los polifenoles una elevada capacidad antioxidante que protege a las células contra el daño oxidativo y por tanto contra el envejecimiento.
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