Si nos metiéramos en el backstage de cualquiera de las Fashion Weeks ¿qué veríamos? ¿Ejércitos de modelos y sus estilistas? Sí. ¿Cientos de trajes, vestidos y zapatos? Claro. ¿Bellas mujeres sentadas al tocador del maquillaje y la peluquería? Sin duda. ¿Y qué tendrían todas ellas en común? Mucho estilo, mucha altura, pómulos de infarto y una tarjeta de visita o carta de la baraja sujetada con una pinza en sus cabellos.
¿De qué estás hablando, Ximena?
Como lo habéis leído: uno de los grandes y más sencillos trucos de la industria de la moda y la belleza es sujetar el flequillo de las modelos con pinzas y cartas para poder maquillarlas sin dejar las típicas y horrorosas marcas que dejan todas estas horquillas y pincitas en el pelo. Porque hay que ver qué difícil es darle volumen o marcarle rizos a la melena, pero cuando no queremos dejar huella no dudéis que la dejaremos.
La otra opción para no dejar marcas en el flequillo y los lados del cabello es no ponernos nada y maquillarnos incomodísimas mientras todos los pelos deciden meterse en el ojo con la máscara fresca, posarse sobre la frente con la base de maquillaje aun sin secar y meterse entre la brocha y la mejilla mientras tratamos como podemos de ponernos el colorete (de estos malabarismos vemos mucho en Youtube, ¿verdad? :D)
Para seros sincera yo soy incapaz de maquillarme con todo ese pelo en la cara y siempre me lo tengo que retirar de un modo u otro, pero, con el pelo tan fino que tengo, sólo necesito 20 segundos de la pinza puesta para dejar una marca, un pliegue, un ‘kink’ indeseado que luego no se va hasta que me vuelvo a lavar el pelo. ¡Así de rebelde y resistente es! (Eso sí, los rizos que me tomo el tiempo y el cuidado de hacer con las tenacillas no me duran ni dos horas). Así que me relegué a la idea de que por siempre tendría que llevar la marca del pecado. Hasta que descubrí el As y nunca mejor dicho.
Quién sabe a quién se le ocurriría el truco pero se ha convertido en uno de los secretos ‘mejor compartidos’ de todos los backstage de la moda, la fotografía y el espectáculo. Yo lo he puesto a prueba ¡y ya no me deshago de él! Lo he llevado al límite dejando la pinza puesta durante una hora mientras me hacía todo el maquillaje y me vestía y al retirarla… ¡tachán! ¿Marcas? ¿Qué marcas?
Por si no me he explicado bien, el truco en sí no es más que poner una tarjeta o una carta de la baraja entre la pinza y el pelo, de esta manera no se hace el surco tan odioso. Y, claro, ¡nada mejor que usar mi propia tarjeta de Deseo Beauty! Me las diseñé hace poquito y me encanta como han quedado. Ya había probado este diseño de ‘mini card’ con las tarjetas de Deseo Hair y siempre quedo feliz con el resultado. ¿Os gustan? Por otro lado estas mini tarjetas son mucho más útiles a la hora de hacer este truco ya que son obviamente más pequeñas y menos pesadas por lo que se sujetan mucho mejor y son menos engorrosas que una tarjeta de la baraja que es lo que más he visto usar.
Vale la pena decir que este no es un post patrocinado por Moo (la compañía que hace las tarjetas) ni nada por el estilo, si no que me encantan los productos que hacen – llevo más de 2 años con ellos – y que ya que hablábamos de tarjetas pues se hacía necesario enseñaros las mías (modestia a parte) y también deciros que si queréis unas como estas para vosotras o cualquiera de los otros diseños tan bonitos que hace esta compañía londinense, podéis pedirlas haciendo clic aquí. A vosotras os darán un 10% de descuento y a mi me dan puntos para canjear por descuentos en mis futuras compras de tarjetas. Así de simple y honesto. ¡Como todo en Deseo! Luego, por favor, ¡me mandáis las fotos de vuestros diseños que he visto verdaderas maravillas!
Chicas, no me marcho sin dejaros una notita sobre el Curso de coloración personal
– ya sabéis, el curso online de 1 mes juntas donde aprenderemos a analizarnos
y analizar a otros para saber qué colores nos favorecen y cuales no nos hacen ningún favor
dependiendo de nuestro cabello, piel, ojos y la combinación de los tres. Los resultados son
impresionantes. Aun quedan algunas plazas aquí para la primera edición que empieza el
1 de abril.Se va llenando poco a poco ¡y estamos todas muy emocionadas! ¿Os veré por allí?
Y ahora sí…