- Anula todas tus tarjetas de crédito y ahórrate el dineral que te dejas en comisiones. Con esta medida, además de ahorrar, tendrás un mayor control de tu economía porque no podrás gastar aquello que no tienes.
- Anula todas las tarjetas de débito menos una y ahórrate las comisiones anuales.
- Anula las cuentas corrientes, cuentas de ahorro y todas aquellas cuentas que nunca utilizas y evita pagar comisiones.
- Utiliza los cajeros del banco emisor de la tarjeta y no pagues comisiones al retirar efectivo.
- Elige una cuenta corriente y una cuanta de ahorro sin comisiones.
- No guardes el dinero que no utilizas en una cuenta corriente; haz que trabaje para ti y te rinda beneficios.