Trump contra Biden

Publicado el 12 abril 2021 por Jamesnava123

Durante este tiempo en el que Biden se dedica a destrozar Estados Unidos con sus desastrosas políticas socialistas, Trump se ha consolidado como el líder indiscutible del sentido común y el conservadurismo auténtico. Cada declaración, gesto o apoyo del presidente pone de relieve por qué millones de ciudadanos confiaron y acertaron al votar a Trump.
En una entrevista esta semana pasada con Heather Childers para el programa "American Agenda", de la cadena de TV Newsmax, Trump resumió a la perfección la situación actual al declarar que los adversarios y competidores de Estados Unidos respetaban su Administración y no se atrevían a burlarse de sus representantes de la forma en que China y Rusia, por poner dos ejemplos, se han burlado públicamente de los funcionarios de Joe Biden durante una reunión al más alto nivel en Alaska con el secretario de Estado Antony Blinken y el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan.
Trump también criticó la agresión abierta de China durante los últimos meses, incluida su retórica peligrosa hacia Taiwán; el renovado acercamiento del equipo de Biden a Irán para intentar iniciar un nuevo y desquiciado acuerdo nuclear. Asimismo, los ataques del presidente ruso Vladimir Putin a Biden en los medios de comunicación después de que Biden llamara a Putin "asesino" y la concentración militar rusa a lo largo de la frontera con Ucrania, también fueron destacados por Trump como señales de que los líderes mundiales no "respetan" al senil que ocupa la Casa Blanca vía fraude electoral. Trump recordó que Rusia nunca fue agresiva con su Administración ni con nuestro país gracias a su fuerte liderazgo, y que el "engaño de Rusia", las acusaciones nunca probadas de colusión que, sin embargo, fueron repetidas hasta la saciedad por políticos demócratas y numerosos miembros progres de los medios de comunicación, dificultaron la relación con el gobierno ruso; pero, a pesar de eso, siempre tuvieron respeto por el presidente y por nuestro país. Algo que ya no sucede con Biden.
El presidente Trump se refirió en esa esclarecedora entrevista a su relación con el líder norcoreano Kim Jong Un, quien ha comenzado a desafiar a la Administración de Biden con una serie de recientes y preocupantes lanzamientos de misiles. Algo que ocultan los medios de comunicación (sí, los mismos que ocultaron el fraude electoral y amparan el recorte de libertades civiles con la excusa del coronavirus). Trump recapituló e hizo hincapié en que esos medios alarmaban cuando fue elegido presidente y decían que íbamos a ir a la guerra con Corea del Norte; algo que finalmente no sucedió, sino todo lo contrario. Trump estableció una estabilidad en la región gracias a su habilidad negociadora.
El muro fronterizo con México es otro tema que diferencia a Trump de Biden. Trump puede estar orgulloso de haberlo iniciado y de haber construido cientos de millas que hicieron el país más seguro. Biden ha sumido la frontera en un caos y no está tomando las decisiones que hacen falta. El muro de Trump es tan necesario, de hecho, que hasta Biden está considerando continuarlo.
La actividad de Trump contrasta con un Biden claramente disminuido física y mentalmente, que no está capacitado para hacer el trabajo. Es evidente para todo el país que Biden no está tomando las decisiones adecuadas, y las que adopta su Administración le son dictadas por las mismas personas implicadas en el fraude electoral. Ya saben: la Camarilla del establishment y el Estado Profundo.
Trump bromeó al decir que Biden gobierna como Bernie Sanders con estereoides (agenda de ultraizquierda) y lamentó el giro que está imprimiendo al país para convertirlo en una nación socialista. A pesar de todo ello: del giro socialista de Biden, de los desafíos provocados por la pandemia del COVID-19 y los cierres estatales (sobre todo en Estados gobernados por Gobernadores demócratas cada vez más pusilánimes e inútiles), su herencia de una economía próspera y fuerte es el testimonio real del gran trabajo que hizo la Administración Trump.
Un trabajo impecable también en política exterior, siendo el artífice de los Acuerdos de Abraham entre Israel y los países árabes, o en el desarrollo de las vacunas contra el coronavirus, que han permitido a Estados Unidos liderar la vacunación.
La energía y la buena forma física y mental de Donald Trump contrastan con el evidente letargo y deterioro cognitivo de Joe Biden. Un hecho que cualquier persona objetiva ve y reconoce (salvo los fanáticos de ultraizquierda que no se enteran de nada y viven en el mundo de los Simpson).
Además de analizar la actualidad con certeza, Trump sigue siendo el referente de la lucha contra los que quieren imponer un pensamiento global único. Frente a los que pretenden influir en las leyes electorales, como en el caso de Georgia, para que no haya una identificación del votante y, por tanto, elecciones transparentes y libres de fraudes, Trump hizo un llamamiento a boicotearlos, ya sea la liga de béisbol o empresas como Coca Cola, Delta, etc.
Mientras tanto, el presidente Trump sigue centrado en apoyar a candidatos republicanos que defienden su agenda America First de cara a las elecciones midterm de 2022. Esta semana pasada fue intensa en esta área. Sus elecciones de los candidatos republicanos para la Cámara de Representantes, el Senado, los puestos de Gobernador, los contendientes para secretario de estado y fiscal general han demostrado la fuerza de su influencia y liderazgo en el Partido Republicano.
La lista de endorsements (apoyos) ofrecidos por Trump hasta ahora es esta:

Marco Rubio, Florida: Trump respaldó a Rubio el 9 de abril, llamándolo un "defensor incansable" de los ciudadanos de Florida. "Marco ha sido un militante incansable para los residentes de Florida, peleando por bajar nuestros impuestos, defendiendo nuestra segunda enmienda, abogando por nuestros militares y veteranos, por una seguridad nacional fuerte y por todos aquellos estadounidenses olvidados (...). Juntos hemos trabajado a favor de las comunidades cubano-americanas y venezolano-americanas, logrando grandes progresos".
Ron Johnson, Wisconsin: Trump pidió a Ron Johnson (republicano por Wisconsin) que se presente a la reelección mientras éste considera postularse para un tercer mandato. La carrera de Wisconsin por el Senado es una piedra angular de las estrategias de ambos partidos para controlar el próximo Senado. La cámara está actualmente dividida 50-50, y los demócratas tienen una mayoría debido sólo al voto de desempate del vicepresidente Kamala Harris.
Rand Paul, Kentucky: Rand reveló a principios de este año que tiene la intención de postularse para la reelección en noviembre de 2022. Trump respaldó al senador el 8 de abril: "Rand Paul ha hecho un trabajo fantástico por nuestro país y por la increíble gente de Kentucky. Lucha contra el pantano de corrupción en Washington, los liberales radicales de izquierda, y especialmente contra los destructivos RINOS, de los cuales hay demasiados, en el Congreso. Rand continuará defendiendo nuestras excelentes políticas AMERICA FIRST porque cree en detener el despilfarro, defender nuestros derechos de la Segunda Enmienda y cuidar de nuestros militares y veteranos. Estoy orgulloso de trabajar con Rand en nuestra batalla para hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande. Él tiene mi respaldo completo y total para otro período en el Senado de los Estados Unidos. Kentucky tiene un verdadero campeón en Rand Paul".
John Kennedy, Louisiana: Trump respaldó al senador Kennedy el 4 de marzo para su reelección y lo calificó de "senador y persona espectacular". Kennedy fue uno de los que votaron para no certificar a Biden en el Colegio Electoral ante las evidencias de fraude y votó a favor de absolver a Trump en el injusto segundo impeachment en relación con el asedio al Capitolio del 6 de enero.
Tim Scott, Carolina del Sur: Scott recibió el "respaldo total" de Trump el 2 de marzo: "Es un senador sobresaliente y una persona que trabaja incansablemente para la gente de su gran estado y los Estados Unidos".
Mo Brooks, Alabama: Trump respaldó la candidatura de Brooks para el Senado. El congresista se postula para reemplazar al senador Richard Shelby, quien no se presenta para la reelección. Brooks, uno de los mayores partidarios del presidente en Capitol Hill, fue uno de los primeros en el Congreso en decir que objetaría los resultados del Colegio Electoral, alegando y con razón que hubo fraude electoral en las elecciones de 2020. "Pocos republicanos tienen tanto VALOR y LUCHAN como el congresista de Alabama Mo Brooks. Mo es un gran líder republicano conservador, que defenderá a America First sin importar los obstáculos de los medios de noticias falsos, los RINO o los socialistas que puedan interponerse en su camino. Mo Brooks es pro-vida, ama a nuestras Fuerzas Armadas y nuestros veteranos, protegerá nuestra Segunda Enmienda, combatirá la agenda de fronteras abiertas de Biden, está luchando por la integridad de los votantes como pocos, y fue el copresidente de nuestra campaña ganadora y que estableció récords en Alabama en 2020. Mo Brooks tiene mi respaldo completo y total para el Senado de los EE. UU que representa al Gran Estado de Alabama. ¡Él nunca te decepcionará!".
El congresista de Alabama, que fue elegido por primera vez para la Cámara en 2010, obtuvo el respaldo de Trump sobre Lynda Blanchard, la ex embajadora de Estados Unidos en Eslovenia, quien sirvió durante la Administración Trump.

John Boozman, Arkansas: Boozman recibió el respaldo de Trump el 8 de marzo. El senador dijo que estaba "agradecido" por el apoyo del presidente, y agregó: "Trabajamos juntos para reducir los impuestos, revertir las regulaciones, asegurar nuestra frontera, defender nuestros veteranos, derechos de la Segunda Enmienda y proteger la vida". Boozman votó a favor de absolver a Trump durante su segundo impeachment.

Jerry Moran, Kansas: El ex presidente respaldó a Moran a finales de febrero, y elogió al senador por ser "firme en defensa, los veteranos, la frontera y nuestra Segunda Enmienda". Moran votó en enero para absolver a Trump en su segundo impeachment.

Mike Crapo, Idaho: El senador Crapo fue respaldado por Trump el 5 de marzo por ser "duro con el crimen, fuerte en la frontera y luchar por nuestros militares y nuestros veteranos".

Max Miller, Ohio: Miller, un asistente de la Casa Blanca, obtuvo también el respaldo de Trump. Miller se está postulando frente a Anthony González. González fue uno de los 10 republicanos de la Cámara de Representantes que votaron a favor del artículo de juicio político sobre "incitación a la insurrección" tras la romería al Capitolio el 6 de enero.
"Max Miller es una persona maravillosa que hizo un gran trabajo en la Casa Blanca y será un congresista fantástico. Es un veterano de la Marina, un hijo de Ohio y un verdadero PATRIOTA", dijo Trump en un comunicado. "El representante actual Anthony González no debería representar a la gente del distrito 16 porque no representa sus intereses o su corazón. ¡Max Miller tiene mi respaldo completo y total!".

Julia Letlow, Luisiana: Respaldada por Trump por su postura antiaborto, sus posiciones duras contra el crimen y su apoyo a una frontera segura entre Estados Unidos y México, el presidente respaldó a Letlow el 10 de marzo. Es la viuda del difunto representante estadounidense Luke Letlow, quien murió en diciembre después de luchar contra el COVID-19.

David Shafer, Georgia: Trump respaldó a Shafer, quien se postula para la reelección, el 24 de marzo. Elogió al presidente del Partido Republicano y dijo que hizo un "trabajo fenomenal reclutando y capacitando a un número récord de voluntarios".
"¡Nadie en Georgia luchó más por mí que David! ¡Él NUNCA se rindió! Tiene mi total respaldo para la reelección".

Drew McKissick, Carolina del Sur: Trump respaldó a McKissick, quien se postula para la reelección, el 30 de marzo. El presidente lo elogió por "elegir más republicanos en 2020 que en más de 140 años".
"Drew luchó todo el camino hasta el Tribunal Supremo para defender nuestras leyes de votación, y GANÓ", refiriéndose a un caso relacionado con las elecciones. "Continuará haciendo crecer el partido y ayudará a los conservadores a ser elegidos en el Gran Estado de Carolina del Sur".

Bob Paduchik, Ohio: Trump respaldó a Paduchik, quien es un operativo político republicano desde hace mucho tiempo en el estado cambiante de Ohio, días antes de las elecciones a fines de febrero. Ganó la carrera para reemplazar a Jane Timken, quien ahora se postula para llenar la vacante que se abrirá después de la jubilación del senador Rob Portman. Paduchik dirigió las campañas de Trump en Ohio en 2016 y 2020, y ambas tuvieron éxito. También fue el copresidente adjunto del Comité Nacional Republicano durante la primera parte de la Administración Trump. "Lideró con éxito mi campaña tanto en 2016 como en 2020, y tuvo aún más éxito la segunda vez", dijo Trump. "Él es sobresaliente en todos los sentidos, y le doy todo mi respaldo".
Jody Hice, Georgia: Trump respaldó al representante Hice mientras se postula para secretario de estado de Georgia. El presidente ha afirmado repetidamente que el fraude electoral le costó el estado de Georgia; afirmación respaldada en la evidencias por todos conocidas. El presidente culpa al gobernador de Georgia, Brian Kemp, y al actual secretario de Estado, Brad Raffensperger, ambos republicanos muy descafeinados, argumentando que podrían haber hecho más para investigar las acusaciones de fraude, lo cual es cierto. "A diferencia del actual Secretario de Estado de Georgia, Jody lidera con integridad. Tengo un 100% de confianza en Jody para luchar por elecciones libres, justas y seguras en Georgia, de acuerdo con nuestra querida Constitución de los EE. UU. ¡Jody detendrá el fraude y hará que nuestras elecciones sean honestas!".
Tim Griffin, Arkansas: Trump respaldó al vicegobernador de Arkansas, Tim Griffin, en su candidatura para ser el próximo fiscal general del estado. Originalmente había anunciado una candidatura a Gobernador, pero luego saltó a la carrera para fiscal general.

Gobernadores:

Sarah Huckabee Sanders, Arkansas: Trump respaldó a su secretaria de prensa Sanders para Gobernadora de Arkansas el 26 de enero: "Sarah es fuerte en las fronteras, dura con el crimen y apoya plenamente la Segunda Enmienda y nuestros excelentes agentes del orden". Sarah sirvió bajo la Administración de Trump de 2017 a 2019, y recibió el primer respaldo de Trump desde que dejó la oficina presidencial para su candidatura a ocupar la gobernación que ocupó su padre, Mike Huckabee, de 1996 a 2007.

Henry McMaster, Carolina del Sur: Trump respaldó a McMaster para su candidatura a la reelección de 2022 el 5 de marzo y dijo: "También ha sido un director ejecutivo fabuloso para su estado". En respuesta, McMaster, aliado desde hace mucho tiempo de Trump, agradeció al presidente y dijo: "Me siento honrado de que esté conmigo mientras mantenemos la excelencia de Carolina del Sur!". McMaster se convirtió en Gobernador tras la partida de la ex Gobernadora Nikki Haley, quien se desempeñó como embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas durante la Administración Trump. McMaster se desempeñó anteriormente como vicegobernador del estado.

La pregunta es: ¿Qué nos enseñan todos estos apoyos de Trump? La respuesta es clara: Los ciudadanos apoyarán y votarán a los candidatos que defiendan políticas MAGA. Es decir, los republicanos deben luchar de forma prioritaria por los trabajadores estadounidenses, tal y como siempre hizo Trump.
Tras las reuniones de Trump con el líder republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, éste ha escrito un memorando sobre cómo el Partido Republicano puede recuperar la Cámara en 2022. En este documento, lleno de ideas trumpianas, se argumenta que el Partido Republicano debería apelar explícitamente a los votantes de la clase trabajadora y ganarse la identidad como partido de los trabajadores.
Es una realidad conocida que la mayoría de los votantes de la clase trabajadora votan actualmente por los republicanos más conservadores; nuestra participación entre ese electorado ha aumentado significativamente durante la última década, especialmente desde 2016, cuando Trump y un reducido grupo de asesores cercanos empezaron a liderar el Partido Republicano. Este impulso se acelerará hacia la victoria si nos consolidamos como el Partido de la Clase Trabajadora y nos alejamos del establishment podrido y corrupto hasta la médula.
Este memorando causó bastante atención de los medios, en parte porque enfureció a muchos políticos y miembros de los medios de comunicación. No es ningún misterio que muchos de ellos no quieren que el Partido Republicano sea un partido de la clase trabajadora. Les encanta la identificación heredada del Partido Republicano como el partido de las corporaciones multinacionales, algo que ya no es cierto, y no están interesados en cambiar ese perfil. Pero la realidad es que Trump cambió el perfil y entregó el poder al pueblo y se lo quitó a los que siempre han mangoneado: medios, prensa, establishment, grandes empresas...
En este memorando se pone de manifiesto otra realidad: que los demócratas ahora son el partido de Wall Street, las multinacionales y los lobbies, mientras que los conservadores representamos a las personas que se esfuerzan, estudian y trabajan. Se ha producido un cambio importante y los demócratas no quieren que nadie se dé cuenta. Trump ha hecho posible ese cambio de la realidad electoral que favorece al Partido Republicano. Si el GOP se consolida como el partido de los votantes de clase media y trabajadora, volveremos a ver a Trump en la Casa Blanca y a más presidentes conservadores en el futuro. Dejaremos a los demócratas defendiendo intereses elitistas, como hacen ahora, y ejecutando políticas de pago, sólo que a diferencia del pasado, cuando compraban votos con dinero público, ahora se venden a las grandes multinacionales y gobiernos extranjeros.
Trump acierta al establecer una comunicación clara y firme con los ciudadanos de clase media para defender sus intereses. Esto significa anteponer los intereses de los trabajadores estadounidenses a los de los políticos. También significa anteponer los intereses de las pequeñas y medianas empresas a las grandes corporaciones, proteger los derechos de libertad de expresión de los estadounidenses al enfrentar a las grandes tecnológicas y reconocer que los trabajadores estadounidenses siempre deben estar antes que los trabajadores extranjeros. Es decir, America First y políticas MAGA.
La nueva coalición republicana incluye a trabajadores, propietarios de pequeñas empresas y estadounidenses dedicados a los ideales y valores estadounidenses que aprendieron en la escuela y en familias como Dios manda. Los demócratas, por otro lado, ahora representan a los oligarcas corporativos, intelectuales de pacotilla y los sindicatos del sector público que buscan vivir de lo ajeno. Si el Partido Republicano puede proyectar esta nueva realidad en la mente del electorado, entonces nuestro futuro será brillante. Es todo esto por lo que está luchando Trump mientras usted lee estas líneas.
El presidente se ocupa y se preocupa en la Casa Blanca de invierno, en Mar-a-Lago, Florida, en motivar y forjar a un gran grupo de patriotas dedicados a servir los intereses reales de los ciudadanos; candidatos que apoyan familias fuertes, una nación soberana, una sociedad libre y una economía próspera para todos. O sea, fortalecer el movimiento conservador mediante una red de personas con talento y de ideas afines que puedan ayudarse mutuamente profesional y personalmente durante los próximos años.
Trump contra Biden no es algo personal, en absoluto, es la lucha de políticas conservadoras sensatas contra un socialismo destructor que no vamos a consentir en este país.