El miércoles, hubo sesiones plenarias de la COP, Conferencia de las Partes (CdP 15) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y la COP/RdP, Conferencia de las Partes como Reunión de las Partes del Protocolo de Kyoto. Además, se convocó a varios grupos de contacto y consultas informales sobre una serie de cuestiones, entre las que se incluyeron una visión compartida, la mitigación, la adaptación, el financiamiento y la tecnología en el marco del GTE-ACLP, la reducción de las emisiones del Anexo I y otras cuestiones del GTE-PK, y varios temas en el marco del OSACT y el OSE.
El pedido de Tuvalu de un instrumente jurídicamente vinculante también obtuvo un apoyo significativo de la sociedad civil. Y al regresar al plenario por la tarde, los delegados debían pasar por una multitud que manifestaba su apoyo a la propuesta. Como esa manifestación no había sido autorizada, el personal de seguridad respondió rápidamente y mantuvo a la multitud en los pasillos y fuera de las salas de reunión. “Tememos que esto signifique que la seguridad será cada vez más dura”, comentó el participante de una ONG. Otros signos de la creciente tensión que se vive en Copenhague fueron los informes de enfrentamientos no violentos entre la sociedad civil y un grupo de escépticos del cambio climático.
“Finalmente, las cosas se están empezando a calentar”, comentó un delegado. Algo que también se hizo evidente por el hecho de que los ministros y otros delegados de alto nivel han comenzado a llegar a Copenhague, incluyendo un ministro de China y el enviado especial para el Cambio Climático de Estados Unidos. Asimismo, se está concluyendo la lista de Jefes de Estado que tienen la intención de asistir al segmento de alto nivel.
También hubo cierto ruido a partir de la filtración del texto danés del martes, lo que hizo que algunos delegados se pregunten quién –en el lado danés– ha asumido el liderazgo, y varios delegados del Sur analizando las excepciones del proceso tanto como su sustancia. “Debieron haberse involucrado más con nosotros”, dijo un representante de los PMD. “El grupo que estaba al tanto de este documento era demasiado exclusivo y tiraba para un solo lado”, dijo otro delegado de un país en desarrollo. Sin embargo, muchos países desarrollados continuaron restándole importancia al significado del texto, así como a su filtración.