Un momento incómodo de las madres con sus adorables retoños
Robin Wright sale como el ave fénix de las cenizas luego de un largo matrimonio con Sean Penn del que se nota, le ha servido divorciarse, para recrear con puro talento y una belleza madura sin igual a Roz una galerista australiana que vive al lado de su amiga Lil (Naomi Watts), en un paradisíaco lugar a orillas del mar, junto con su esposo (Ben Mendhelson) quien debe trasladarse a Sidney por su trabajo, y con su hijo Tom (James Frencheville). Allí comparten la vida también con Ian (Xavier Samuel), el indomable hijo de Lil. Los chicos son sorfistas con cuerpos esculturales y hormonas alborotadas. Las señoras son bellas y todos pasan mucho tiempo y realizan actividades juntos. ¿El resultado? Una controvertida fábula moral sobre las elecciones, las pérdidas y las consecuencias, todo en un coctel de arena, sol y playa desde la óptica y el rasero femeninos. Nota: Robin Wright acaba de ganar el globo de oro por su personaje en House Of Cards. Un hurra por las actrices maduras que reciben buenos personajes.