Hay un hecho cierto y es que Rusia ha acumulado tropas en la frontera y nadie acumula tropas si no es para usarlas. Muchos expertos opinan que las tropas rusas entrarían en el Donbass para acabar definitivamente con la ya interminable guerra.
Pero esa acción supondría un choque con el ejército ucraniano y al final, con la OTAN, porque Occidente está suministrando material al ejército ucraniano, que es bastante potente, pero no tiene nada que hacer frente a la apisonadora rusa. También hay asesores occidentales, lo que dejaría en situación delicada a la OTAN. Es decir, que si los rusos cruzan la frontera, nosotros, que no se nos ha perdido nada allí y que no tenemos ningún conflicto con Rusia, tal vez tengamos que ir a defender a Ucrania por un conflicto territorial de muy dudosa legalidad.
Si hacemos un poco de historia, lo primero que observamos es que Ucrania, salvo algún periodo no muy largo, siempre fue parte del imperio ruso, de tal forma, que aunque los ucranianos tienen algunas diferencias, incluso idioma propio, se han considerado rusos a todos los efectos. Lo cual un enfrentamiento con Rusia, sería más bien una guerra civil que otra cosa.
Fue Kruchof (Хрущёв) el que, por la razón que fuera, asignó las dos provincias del Donbass a Ucrania, además de Crimea. No está clara la razón, porque había nacido en Rusia, muy cerca de la frontera de Ucrania (en esa época era una provincia más del imperio), puede que sus antepasados fueran ucranianos. Lo cierto es que fue una cacicada.
Mientras existió la URSS no hubo ningún problema, la frontera era simbólica y no había diferencias entre rusos y ucranianos, pero con la caída de la URSS, aparecieron una serie de repúblicas independientes, entre ellas Ucrania, incluidas las provincias procedentes de Rusia.
Crimea tenía el problema de ser la base de la flota soviética, de modo que se repartieron los barcos y los rusos se mantuvieron allí hasta que las cosas se tensaron y entonces fue cuando se quedaron con Crimea y echaron a los ucranianos, con gran contento de la población, que era en su inmensa mayoría de rusos. La cosa estaba clara, la base naval de Sebastopol era demasiado importante como para que Rusia no fuera a la guerra si era preciso. Todos, incluida Ucrania, aceptaron la situación, aunque con protestas formales y sanciones diplomáticas y demás, pero sin llegar a nada más serio que incursiones desde entonces en aguas rusas de aviones y barcos de la OTAN, hasta que los rusos los echan.
La cosa fue distinta en el Donbass, la población mayoritaria era rusa y quisieron volver a la patria, así que tensaron la cosa y se declararon rebeldes, lo que obligó a intervenir al ejército ucraniano. Mientras los rebeldes rusos declaraban dos repúblicas independientes, pero que en la práctica es como una.
Hasta ahora, la guerra se ha mantenido en la frontera entre el Donbass y Ucrania, con bastante salvajismo, según algunas fuentes, lo que resulta extraño entre hermanos. Ambos se acusan de disparar sobre la población, formada en su mayoría por ancianos, a ambos lados del frente, pues los jóvenes se han ido hacia el interior.
¿Y cómo se ha llegado a esto? Pues como consecuencia de la revolución naranja ocurrida hace algo más de quince años. El gobierno de Kiev se declaró pro occidental y eso sentó mal a los rusos, que siempre consideraron a Ucrania como parte suya. Si aceptaron la independencia fue para tener un estado tapón frente a la OTAN, papel que cumplían los países del Este cuando la URSS y no tener frontera directa con la OTAN.
Una vez alineada Ucrania con Occidente, ya no era un estado tapón o al menos, no demasiado y entonces fue cuando se quedaron con Crimea y apareció la reivindicación en esas dos provincias.
¿Y por qué ahora? Pues porque la guerra ya dura demasiado y la OTAN no hace más que provocar a Rusia, cierto que Rusia también provoca, pero menos. No tiene ningún sentido tener tropas en las repúblicas bálticas, sabiendo que Rusia se sintió feliz cuando se separaron, pues aquello era un pozo sin fondo y no servía para nada. Pero allí estamos, en concreto nosotros, gastando un dinero que no tenemos y haciendo el ridículo. Creo que el buen doctor ha enviado como quince tanques para enfrentarse a los 15 000 que tiene Rusia.
Pero eso solo no justifica ese movimiento de tropas. Tal vez hayan pensado que los useños van a estar muy ocupados defendiendo Taiwan de los chinos y que no se pueden permitir mandar tropas a unos territorios cuyo único mérito son unas minas de carbón, que si bien hace unos años, eran importantes, hoy con el carbón demonizado, no valen una guerra.
De Putin se pueden decir muchas cosas y seguramente más malas que buenas, pero tiene las ideas claras y cree en algo, no se sabe en qué, pero cree. Biden, aparte de no enterarse y no saber lo que ocurre, no cree en nada, salvo el dinero que le dieron a su hijo, presuntamente, los ucranianos. Se dirá que en la práctica, Biden, no cuenta, pero los que toman las decisiones tampoco creen en nada ni saben bien lo que hay.
Esperemos que esa acumulación de tropas sea un farol y negocien en serio y acaben con la guerra, porque la alternativa es terrible y nosotros en medio sin tener ningún motivo para ello.
vanlop