Ucrania es un país en el que, de no ser por la Eurocopa de 2012, más de uno y más de dos no sabría ubicar en el mapa. Ahora con las tensiones en la zona, parece que Ucrania está aquí al lado y que el mundo entero está pendiente de lo que pasa allí.
Sin embargo, no queda mucho para que los que piensan que el circo que hay montado allí no les afecta, se den cuenta del error que comenten. Resulta que el mundo entero no focaliza su atención en el país porque sí, que va, parece mentira que no sepamos en qué mundo vivimos y que si las cámaras van allí es porque hay dinero y mucho de por medio.De lo que pocos medios hablan es de la tubería de Ucrania, un enorme gasoducto que conduce el gas natural a Europa y que es responsable de buena parte de la calefacción de la que disfrutamos. Los rusos hablan de re-anexionarse Crimea, los occidentales, de la libertad y de la democracias, sin embargo, para mi es la misma historia de siempre, la que dice que el dinero mueve el mundo y que el altruismo, al menos entre los que mandan, no existe.Por eso, cuando el próximo mes descubráis que ha subido la factura del gas, acordaos del circo ucraniano y de que nada es gratis y, la libertad, mucho menos.