Las provincias del sur y del este de Ucrania y la república autónoma de Crimea, cuyos representantes se han reunido en la ciudad de Járkiv, anunciaron que asumen la plenitud del poder hasta que se restablezca el orden constitucional en Kiev.
A la reunión asisten los diputados de todos los niveles y gobernantes de las provincias de Donetsk, Lugansk, Dnipropetrovsk, Járkiv y la república autónoma de Crimea, así como los alcaldes de las ciudades de Járkiv, Sebastopol y Donetsk.
"Los acontecimientos de los recientes días en la capital de Ucrania, la ciudad de Kiev, han conllevado la parálisis de los órganos del poder y la desestabilización de la situación en el país", reza el documento que han aprobado. El texto de la resolución incluye también el llamamiento a los vecinos de dichas provincias a organizarse para hacer frente a la invasión de las agrupaciones armadas ilícitas.
Los órganos del poder central están paralizados, revela la resolución. "La Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania funciona en condiciones de terror, a punta de pistola y bajo amenaza de asesinato". Por este motivo, "las decisiones del Parlamento, adoptadas en dichas condiciones, ponen en duda su legitimidad y validez".
Desde la tribuna de la conferencia, después de que fuera adoptada la resolución, fue proclamado un llamamiento incluso más explícito: "Organicen pelotones, batallones. ¡Adelante los veteranos de la Guerra de Afganistán! Unos grupos terroristas se han apoderado del poder, hay que oponerles resistencia".