Ese fue el primero de tres mensajes que le llegarían, ya que su nombre fue anunciado también en las categorías de Mejor álbum alternativo por su segundo álbum Cosas perdidas y Mejor canción rock por Donde va. Era así, pues, uno de los 10 artistas venezolanos nominados este año.
¿Cómo recibió la noticia? “Con muchísima emoción porque esta vez reconocieron mi trabajo como músico, que es lo que principalmente soy, en lugar de ingeniero de sonido”, que fue en la categoría con la que ganó un gramófono en 2010 junto a Roberto Rincón (su productor musical) y Espuma Andrade, por el trabajo logrado con la difunta agrupación marabina Voz Veis y su disco ¿Cómo se llega a Belén?
Hadjis no es nuevo en el negocio de la música, pero no cree que sea tarde para el reconocimiento internacional. A los 13 años comenzó en clases de guitarra, ya más grande tocó con la agrupación de ska llamada Julia, y desde 2008 inició su prodigiosa carrera musical en solitario. “Aunque tengo muchos años trabajando, mi carrera como solista comenzó realmente hace apenas cuatro años con mi disco debut Presente. Aunque aquí en Venezuela me conocen desde hace un par de años, para el resto del mundo definitivamente soy un artista nuevo”, comenta al otro lado del teléfono desde su Maracaibo natal.
Sus padres lo han apoyado desde siempre. Ahora, cuando es un adulto que cosecha éxitos, no dejan de hacerlo. “Mamá hizo una reseña, como mamá, de los grupos con los que compito”, relata entre risas el artista. “Algo así como ‘este me gusta’, ‘este es más de lo mismo’, ‘este… ¡ay no!”.
Aunque él mismo ya había analizado a sus contrincantes: “Conozco a 3BallMTY; Los Mesoneros, obviamente, Carla Morrison, quien es mi amiga desde la época de MySpace (2007); Lisandro Aristimuño, con quien he tocado; Rosario Ortega, y estoy investigando a los otros”.
“Todos tenemos chance de ganar porque no competimos con un monstruo de la industria como Maná o Ricardo Arjona”, afirma el cantautor criollo de padre griego.
A pesar de que Ulises Hadjis tocó la mayoría de los instrumentos en su primer disco, para este segundo trabajo contó no sólo con una banda, sino que también sumó colaboraciones de artistas de renombre como Luigi Castillo (ex Voz Veis, ahora San Luis), Caplís Chacín (Desorden Público), la soprano mexicana Denise Gutiérrez (Hello Seahorse! y colaboradora frecuente de Zoé), entre otros.
“Cosas perdidas es un disco con más ambición y seguridad desde el punto de vista artístico. Esta vez Roberto y yo sabíamos los elementos con los que contábamos y las colaboraciones que queríamos. Lo veo como un disco en el que conocía mejor mi voz y mis capacidades como compositor”, explica el intérprete.
Cree que aunque no toca rock sino pop, el tema Donde va ha sido apoyado por las emisoras alternativas. “Pero hay que conocer las limitaciones y alcance de tu obra. Para mi es más fácil tocar en una galería de arte y a Chino y Nacho se le haría complicado. Pero a mi se me hace más complicado sonar en las emisoras populares como a ellos. Uno tiene que ser honesto con el espacio natural que tiene su obra, sin negar la posibilidad de ampliarla”, reflexiona.
Tampoco se cierra a eventualmente tener una legión de fans como muchas estrellas del pop. “No sé si el día de mañana meteré a 10 mil personas en un estadio, no me niego a esa posibilidad, pero tampoco es mi meta. Mi meta es hacer discos sinceros que cada vez me gusten más a mi e intentar que esa obra alcance la mayor cantidad de espacios, siempre y cuando no se vaya a pervertir ni se vea perjudicada”.
Ulises Hadjis irá a Las Vegas a la ceremonia del Grammy Latino (el venidero 15 de noviembre) con la esperanza de traerse otro trofeo a casa. Editará Cosas perdidas (que se consigue en vinilo) en EEUU