El pasado fin de semana fue un finde de pesca algo especial. Desde hacia varias semanas, mi novia Isa llevaba dándome la lata con que quería pescar, así que reservamos estos dos días para que aprendiese y conociera lo que es mi pasión.
La mañana del sábado la íbamos a dedicar a que aprendiese a manejarse con el catamarán y aprendiese a lanzar y no solo aprendió (casting y spinning), si no que también pescó. Logramos hacernos con algunos lucios y algún que otro bass.
Dedique gran parte de la mañana a rastrear el fondo del rió con mi Lowrance Elite-5ti en busca de las zonas más profundas del rió y en las que hubiese ramas y troncos sumergidos o algueros y la verdad es que dio sus frutos.
Antes de irnos me dijo que por que no volvíamos por la tarde, así que sin pensármelo le dije que volveríamos.
Nada más llegar pude hacerme con un gran bass, estuvo más floja pero aun así nos divertimos.
El domingo habíamos planeado ir a por siluros con Mario Asensio e Izabella y mientras llegábamos a la zona en la que creíamos que iba a ser más productiva, iba dedicando lances a las luciopercas y sin mucho insistir pude clavar un par bastante grandes y las dos las perdí. Una de ellas por super-paquete y no abrir el freno a tiempo y en una carrera muy potente me partió la linea. La otra tras una larga carrera hacia el fondo sacando varios metros del carrete de spinning, logro librarse del señuelo. Por lo que me pille un pequeño cabreo, más que nada por el fallo que había cometido.
En cuanto nos pusimos a los siluros, empezamos a ver en la sonda siluros por todos lados, la mayoría de ellos de pequeño tamaño con los que Isa disfruto bastante.
Los grande costaba mucho despegarlos del fondo, había que insistir demasiado y no pasarse dándole al clonk, ademas de que al mínimo movimiento extraño o ruido en el pato desaparecía. Pero al final la paciencia dio sus frutos y pudimos ver a la Hart bloody y el Phantom en acción. Pero lo que fue una pasada fue verla pelear con un pez así y sobre todo la sonrisa una vez capturado el pez.
Han sido dos días increíbles, en los que compartir con ella mi pasión, han hecho que sean aun mejor. Puede que hayan sido los últimos lances del año, pero me quedo totalmente satisfecho y creo que no hay mejor manera de acabar un año en el que por lo menos en la pesca ha sido increíble.
Felices Fiestas a TODOS!!!