Y ahora sí (no me resisto), unas cuantas palabras de la contra, mucho más esclarecedoras de lo que yo os vengo contando:
"Entre sin miedo en este mundo roto de humor fino y chistes malos, de psicoanálisis extremo y costumbrismo desarraigado, de interrogación moral sin moraleja, de poesía primitiva y análisis lingüístico. Este mundo lleno de ideas que no se le habían ocurrido a nadie en más de tres mil años."