Esta frase tan poética y a la vez oscura, hace alusión al álbum debut de una banda de heavy occult doom (etiquetas con las que se identifican) llamada Umbrarum Regni y proveniente de Asunción, Paraguay, a quienes encontré rebuscando en Bandcamp (el cual, por cierto, es el lugar para descubrir y/o encontrar material muy atrayente, musicalmente hablando).
Ahora veamos; la banda se cataloga bajo los estilos/categorías/etiquetas mencionados anteriormente, y en esto existe algo de cierto, aunque un detalle para mencionar es que catalogarse como una banda en estos tiempos que corren, es para tomarlo con bastante tino. Claro, en este momento identificarse o rotularse bajo este estilo teniendo a bandas como The Wounded Kings, Abysmal Grief, Paul Chain, Black Oath, Huata o los suecos de Saturnalia Temple, por citar algunos, da como resultado que des a esperar dosis impares de occult rock/doom que te lleven a vislumbrar el horror al cual la humanidad es llevada, todo esto siendo guiado por la voz de un vocalista que te hará ver negras de principio a fin cuando las escuches. Habiendo mencionado qué esperar luego de haber visto tales estilos/categorías/etiquetas, comenzaré diciendo que la banda demuestra tener algunos puntos que figuran muy bien en los rótulos antes citados, como una lírica muy enclaustrada en los clichés del género, por ejemplo, y ni qué decir del tipo de sonidos con los que nos encontraremos.
Partiendo en ciertas partes de un heavy doom, o un doom, con una épica que te hacen recordar o rememorar viejas glorias las cuales cimentaron el camino de lo que es ahora en sí el doom metal (lo comento porque al escuchar este disco, a primeras oídas, te encuentras con sonidos densos ya disfrutados, mas no exentos de volver a ser digeridos con placer insano (todo esto si te deleitó el haber escuchado las bandas anteriormente citadas)), "Gate I" nos muestra a una banda que posee dos cosas: la primera es que, si siguen en esta vía, llegan a ser una buena banda, pero con el punto en contra de que podrían encerrarse en el mismo sonido. La segunda, y lo cual creo que es uno de sus puntos fuertes al momento de escuchar todo el disco, es que tienen un sonido atrayente.
Este disco contiene 9 tracks, de los cuales 3 son interludios o intros a canciones siguientes, dando al escucha una muestra de lo que debe esperar. Las 6 canciones están bien ubicadas. La primera nos muestra a unos no noveles en estas lides mostrando una épica intimista y a la vez una batería con acompañamientos de guitarra, las cuales dan como resultado cierto recuerdo a ese doom clásico que fue tan atractivo en su tiempo. Del cuarto al séptimo tema es donde comenzarán las alegrías de todo doomster que se aprecie, baterías densas, una voz heavy que solo aumenta más el interés al escucharlos para poder ver qué nos tendrán para el final. El último track comienza con una intro que no hace más que incitarnos a ver lo que nos tienen preparado, lo cual resulta más que atractivo.
Ahora, para ser una banda debutante, vale totalmente la pena escucharlos (si eres una persona que gusta de escuchar bandas nuevas, es interesante el ver qué nos aportan, si no serán solo tomados como una banda más a tener en la cabeza cuando te mencionen la escena paraguaya, la cual tiene otros ámbitos como el black metal, por ejemplo, el cual cuenta con más referencias). Cabe mencionar que en la primera escucha que le di al disco me quedé algo decepcionado, pero luego de haber prestado más atención a los detalles (en ciertas partes del álbum encontramos inicios, momentos, puntos álgidos en donde demuestran que podrían haber explotado un poco más la faceta occult), donde me encontré con partes acústicas junto a una voz hablada que sumaban algo bastante resultón, lo cual me hacían ver que tenían más cosas que mostrar. Esto no lo digo como desazón ya que, en sí, la variedad en estos tiempos es uno de los puntos a tomar más en cuenta, ya que casi todas las bandas de este estilo siempre nos mostraran ese sonido.
Publicación: 18 de Marzo de 2016
Grabación: -
Estudios: Hay Hielo Studios, Nexion XI
Miembros: Akvan (voz), Cygnus (guitarra), She (bajo), χάος (guitarra), Dominion (batería)
Discográfica: Man in the Box Records
Productor(es): Didier Parra
Cover: Samuel Araya