Un amor humano

Por Siempreenmedio @Siempreblog

La semana pasada no fue sagrada para el Teatro Guimerá, en Santa Cruz de Tenerife, pero sí uno de esos momentos culmen en cualquier recinto cultural, ese en el que todas las sesiones de las funciones previas cuelgan el cartel de entradas agotadas, días antes de que los actores se suban a escena. Se trataba de Escenas de la Vida Conyugal, versión dirigida por la dama argentina Norma Aleandro (que interpretó en los años 90 a Mariana, y que puede que ustedes recuerden por su papel de madre en El Hijo de la Novia), y con los actores Ricardo Darín y Andrea Pietra sobre el escenario. Esta obra es una creación original de Ingmar Bergman en los años setenta, una serie presentada en seis capítulos que captó la atención de media Suecia y que luego se convirtió en película de éxito y culto internacional. El propio Bergman realizó una versión teatral que llegó a los escenarios alemanes en 1981. La historia es universal: los vaivenes de un matrimonio en crisis. A la época de creación se debe, quizás, que yo encontrara el inicio de la versión argentina, que tuvimos la suerte de ver en Canarias hace unos días, algo estereotipada, con esa excelente actriz que es Andrea Pietra cargada de neurosis ante un Ricardo Darín que ejecutaba a la perfección el perfil de marido sosegado, que sujeta la mano de su histérica señora. Pero no. Es sólo una primera escena. que va desarrollando todo un tejido sentimental y social que nos señala a hombres y mujeres como auténticos ignorantes de nuestros sentimientos. Y así nos va. Tanto en soledad como en pareja.

Si alguna vez tienen ustedes la oportunidad de disfrutar de Ricardo Darín en una obra de teatro no se lo piensen, acudan. Este actor, del que tantas referencias cinematográficas y televisivas acumulamos, consigue que los espectadores nos olvidemos de quién pisa las tablas. Ricardo no es él. Es otro. Un hombre que lleva desde los diez años en el teatro, que posee una técnica impresionante y que, en estas escenas de la vida conyugal, protagoniza una borrachera sublime. Les dejo aquí también en enlace a la versión que HBO estrenó en 2021 de la obra de Bergman, con Jessica Chastain y Oscar Isaac. No la he visto y no sé si quiero perder el encanto experimentado en el directo de un escenario para recaer en el artificio cinematográfico. Mil perdones, pero, tal como dice Ricardo Darín en la obra, "nos amamos de una manera muy humana" y, en principio, así quiero yo al teatro, frente al cine.