Un año más trabajando para KidsHealth

Por Stornel
Muchos de ustedes saben que KidsHealth es una de las webs pediátricas mejor valoradas del mundo. Hace ya años conseguí, a través de un sencillo "trueque", que nuestro hospital fuera el único que dispusiera de acceso libre a ella sin coste directo alguno. Al decir sin coste falto a la verdad. Nosotros nos encargamos de la versión española de KidsHealth. En el 2011 la imagen americana de la web se renovará y la del hospital también. Renovarse o morir.
Al finalizar el año llega el momento de los agradecimientos. Si ustedes entran en KidsHealth podrán ver que el Hospital Sant Joan de Déu es el único fuera de EEUU que figura como Partner y un servidor también es el único revisor "extranjero". Eso me llena de orgullo aunque muchas veces he tenido la tentación de tirar la toalla. Luego les explico el porqué.
El proceso que seguimos para la versión en español es el siguiente. Cada mes, desde la central de KidsHealth, Angela Kates o Jeffey Santoro nos envía 10 temas para traducir. Carmen Montilla, trabajadora fiel y desinteresada, me envía una copia a mí y a Ana Perez, una rápida y fabulosa traductora de temas médicos en inglés. Una vez traducidos se lo envía de nuevo a Carmen Montilla que los archiva adecuadamente y me los reenvía a mí. Con ambos textos -en inglés y español- corrijo los pequeños fallos o arreglo términos médicos y comerciales al español internacional. Una vez corregidos pasan de nuevo por Doña Carmen que los archiva de nuevo y cierra el círculo enviándolos de nuevo a Angela o Jeffrey.
Quizá les pueda parecer complejo pero es un círculo perfecto que funciona como un reloj atómico, sin atrasos, los 12 meses del año, desde hace ya varios años. Estos 120 documentos anuales sólo le cuestan al hospital los honorarios de la traductora. Ni Carmen ni yo percibimos remuneración alguna y, añadiría más, ni el agradecimiento de nadie. A mí no me importa porque aprendo un montón leyendo tantos documentos pediátricos de calidad. Eso me da una capacidad de responder rápidamente a muchas dudas de mis compañeros y residentes en un momento determinado. Por ello, el añorado y bondadoso Jefe de Inmunoalergia, José Ignacio Sierra, fulminado en la mejor época de su vida por un cáncer de páncreas, me llamaba cariñosamente "Pitagorín".
Les he comentado que, a veces, me dan ganas de tirar la toalla pero todavía me retengo. El motivo es muy simple; no hay descanso, no hay remuneración y sí muchas horas de trabajo. A mí trabajar siempre me ha gustado pero siempre que he pedido que alguien me sustituya voluntariamente para mis vacaciones, por enfermedad o exceso de trabajo nadie se ha ofrecido para hacerlo. Me cuesta creer que esta generación de residentes tenga una mentalidad tan weberiana pero eso es lo que hay. Han estado criados en el bienestar y en que "otro ya lo hará". Yo seguiré hasta que mi andamio corporal aguante pero me revienta, sí, me revienta que el trabajo que hace Carmen Montilla no sea reconocido de alguna manera.
En los hospitales, concretamente en el nuestro, hay mucha gente que trabaja muy bien e incluso más de lo que les corresponde. A ésos nadie les considera y se les penaliza si alguna vez cometen un pequeño fallo. Hay dos tipos de trabajadores: los que se sabe perfectamente su categoría y sus ingresos ya que están al alcance de todos como el mío -reducción incluida- y, "los otros", normalmente dirigentes, cuyo salario,vacaciones y jornada laboral son opacos para los demás. ¿Por qué?, ¿tienen vergüenza de decir lo poco que cobran o remordimientos de exhibir todo lo contrario? Jamás lo he entendido. está claro que han de cobrar mucho más pero ¿porqué ocultarlo? Ese no es un mal de nuestro hospital sino de todos los de Catalunya.