Una familia cipoleña regresaba ayer de Chile hacia el Valle cuando quisieron usar el baño en el Paso Fronterizo de Pino Hachado y se encontraron con un panorama desagradable. “Mi hija de cuatro años no podía aguantar sus necesidades y cuando la lleve al baño me encontré con que eran un verdadero asco”, contó Noelia sumamente indignada.
Dijo que regresaban del vecino país y debieron aguardar de 16:20 a 21:15 para poder pasar por la aduana. “Fui a preguntarle a un administrativo si había otro baño para la nena porque ese era imposible entrar y me respondió con mala cara que era el único y que incluso ellos lo usaban, lo cual no creo cierto. No me quedó opción que ponerle un pañal”, relató la mujer.
Señaló que viajan todos los años y que se encontraron con la misma situación de falta de higiene. “La verdad que estoy muy decepcionada por la higiene de los baños de la Aduana Argentina, como ciudadana me da mucha vergüenza porque es la primer imagen que se ve de nuestro país. Al pasar al país vecino los baños públicos son limpios. Es una vergüenza”, se lamentó.
Además de la falta de higiene se quejó por la espera de unas cinco horas de ida y otras similares de vuelta mientras que demoraron sólo unos minutos en la Aduana chilena.