Un bic

Por Jordanvid

Lo conocí en mi infancia y todavía hoy le profeso lealtad y me acompaña en mis escrituras mas rudimentarias “El bolígrafo Bic de cuatro colores”.

La EGB,(Educación General Básica) o La ESO, creo se llama ahora, fue la época en la que hice mis primeras redacciones, encargadas por mis profesores que  me suponían por aquellos días, una carga más que un placer. La exigencia de conseguir una nota aceptable, provocaba un estrés que nunca me dejó disfrutar de aquellas clases de lengua castellana o sociales.

Recuerdo aquellos plumieres llenos de lápices de punta desgastada y los sacapuntas que poco utilizaba; pero destacaba de los demás utensilios escolares,  aquél artefacto innovador venido casi de otro planeta que nos hacía destacar del resto de compañeros y  nos otorgaba un protagonismo ante los demás compañeros.

Tuve algún accidente con él, manchas inequívocas de aquellos juegos en el patio durante el recreo, que por mas que lo intentaba no se borraban y que esperaban la regañina de mi madre al llegar a casa.

Revivo hoy todavía, el placer de aquellas líneas escritas a cuatro colores, que destacaban del resto, frases inequívocas de una infancia pasada, que perduran en mi recuerdo.

Nunca pude resistirme al placer de mordisquearlo, aplacaba mi aburrimiento o quizás mis nervios, pero era mi marca personal, inconfundible, que hacía aquel artefacto único e intransferible.

Otro problema que aún hoy perdura, es el inevitable dilema, de que hacer con aquél verde que nunca se acababa,color que poco utilizaba y que quedaba huérfano de sus hermanos, al final el bolígrafo permanecía aparcado en algún cajón, casi desterrado u olvidado.

No sé si conseguí acabar alguna vez  la tinta  de aquellos cartuchos, mi recurrente despiste, hacia extraviarlos mas de una vez y aunque casi inmediatamente los reponía, el suceso volvía a repetirse  una y otra vez.

Hoy me siento orgulloso de haberlo conocido, mi amistad todavía perdura, quién sabe hasta cuando. Me ha acompañado a lo largo de estos años y todavía hoy le soy fiel, es compañero de múltiples aventuras, de mil desvelos, notas recogidas aquí y allá, algunas importantes, siempre a mi lado a pesar de mis olvidos o mis maltratos, amigo, nunca te olvidaré.

Hoy es mi hija, la que juega con él y me recuerda que el tiempo pasa, pero que algunas cosas perduran en el tiempo y son parte de  Mi Camino de Vida.