Un bosque diminuto

Por Davidalvarez

Como pronosticaban desde hace tiempo, la semana santa está viniendo acompañada de lluvia y frío, después de casi un mes de sequía y calor. El martes había quedado con Pere Soler y José Fernández para visitar unas playas del occidente asturiano e intentar fotografiarlas, pero la mañana no pudo presentarse peor, con bruma y orbayu y un cielo plano y gris.
En vista de que la cosa no parecía mejorar, después de desayunar me acerqué a un pequeño rincón sobre un muro que queda a la altura de mi cabeza, donde ya me pasé varios días como éste haciendo fotos de gotas de agua.
Pero ese día conseguí ver una cosa que hacía tiempo que buscaba, una pequeña mata de musgo con los esporofitos desarrollados y con las gotitas de orbayu sobre los esporangios. Y allí estaba tal como lo había imaginado, como un pequeño bosquecito en miniatura, ajeno a todo lo que pasaba alrededor.
En cuanto a las fotos de las playas, el tiempo nos dio un respiro esa tarde y la mañana siguiente. El cielo se abrió por unos momentos y nos permitió disfrutar de unas bonitas nubes y colores sobre las rocas del mar, pero eso ya os lo contaré otro día.
NOTA: como siempre, haced click en la foto para verla mas grande.