Un buen día, como cualquier otro

Por Siempreenmedio @Siempreblog

Hoy, Día de la Mujer, es un buena jornada, como cualquier otra, para desear darle un abrazo a las que, ahora mismo, cogen la mano de quien tiene miedo en medio de la guerra, a las que han impuesto un velo, unos estudios, un trabajo, que no desean, a las que han prohibido estudiar, a las que han insultado, acosado, violado o asesinado. Es un buen día para dar gracias a las cuidadoras, a las que alientan a las cuidadoras, a las que dan un respiro a las cuidadoras, a las que aman, comprenden y sostienen a las cuidadoras. Hoy es un excelente día para abrazar a todas las mujeres que han perdido algo o alguien, que desearon una vida que no les dejaron tener, que han sido mutiladas, que van a ser casadas por obligación este fin de semana, que no saben si tendrán algo para comer.

Es un buen día este para dar algo de aliento a las que hoy tendrán que caminar kilómetros para acudir a una escuela, para recoger agua, para pastorear el rebaño. También a las que trabajarán en el campo sin apenas descanso, a las que cobrarán siempre menos que sus compañeros, a las que han separado de sus madres, hermanas y abuelas, a las que están en medio del mar, asustadas, huyendo de lo malo sin saber si se encontrarán con lo peor.

Es hoy un gran día para dar las gracias a las mujeres que, a pesar de todo, sonríen, echan una mano, abrazan, limpian lágrimas, recogen las ruinas, limpian destrozos, se caen y se levantan, o se acuestan al lado de quien cayó. Y para ofrecer consuelo a las que lloran, se desesperan, se resignan, se deprimen o pierden los nervios. Hoy, como cualquier otro día, es bueno para que las mujeres nos recordemos.