Un buen profesor

Por Josep Pradas

Isaías Lerner

"Aquel profesor sabía algo fundamental sobre el arte de la enseñanza. Un maestro puede ayudar a sus alumnos a descubrir territorios desconocidos, proporcionarles información especializada, ayudarles a crearse una disciplina intelectuals pero, por encima de todo, debe generarles un espacio de libertad mental en el que tengan la oportunidad de ejercitar la imaginación y la curiosidad, un lugar para aprender a pensar."Alberto Manguell, Una historia natural de la curiosidad. Madrid, Alianza, 2015, pág. 82, refiriéndose a su profesor de literatura de secundaria en Buenos Aires, Isaías Lerner, en los años 60.