En esta vida no todo puede estar relacionado con en ajedrez, así que en este artículo he decidido salirme un poco del tema ajedrecístico y comentaros como el martes pasado los del blog
restaurantes en Madrid, también conocido como
Cucharete, montaron la de Dios. Sólo tenéis que echar una ojeada a la foto adjunta... no, no se trata de un cochinillo jugando al ajedrez, sino que soy yo, un ajedrecista contumaz, disfrazado de cochinillo suplicante (si hacéis clic sobre la foto la veréis un poco ampliada). Por cierto, si queréis conocer el sitio donde se come el mejor cochinillo de Madrid, deberéis seguir leyendo este artículo.
Ciertamente los de Cucharete son especialistas en montarla bien montada, yo os emplazo a que leáis la
crónica del Cochinete de Cucharete, no tiene desperdicio. Y también os recomiendo encarecidamente el restaurante
El Pedrusco de Aldealcorvo, donde se celebró el evento, ya que en su vetusto y remodelado horno de leña (ver segunda foto), hacen maravillas con los cochinillos, no encontraréis en
Madrid un sitio mejor donde degustar esta vianda, yo diría que ni los del Mesón de Cándido en
Segovia les superan.
Por cierto, no penséis que fue sencillo ganarme un sitio en el evento, tuve que escribir una receta muy personal y en tono jocoso en otro de mis blogs,
cochinillo al vuelo de bajo coste. Si tomáis la decisión de leerla espero que os divierta como a los de Cucharete.
En suma, una fiesta sin parangón, donde tuve el gusto de compartir mesa con
Enrique Brito,
Leo Borj y
Emilio Rey, tres personajes de la blogosfera cuyos blogs no tienen desperdicio. En la foto podéis ver uno de los dos cochinillos que tuvimos el placer de comernos.
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