Hola! Cómo estáis? Cuando un cosmético me convence suelo ser fiel, aunque por mi trabajo es inevitable cambiar, intento no sacrificar ciertos productos que me van bien y que hacen que mi piel se resienta tras un tiempo sin usarlos.Así que es en el maquillaje donde cambio bastante. Un cosmético que no suelo repetir es el corrector, como cunden tanto, me apetece cambiar y probar otras texturas y marcas. Algunas estaréis sorprendidas, después de tanto tiempo en la palestra nos vas a hablar del mítico corrector de Benefit? Pues...sí! jaja. Reconozco que probablemente a la mayoría no les descubra nada nuevo pero por si acaso hay alguna rezagada como yo, os cuento lo encantada que estoy con este corrector.
Me encanta el packaging, un botecito lila que en mi cajón repleto de cosméticos de maquillaje generalmente de color negro se localiza fácilmente, no estoy bromeando, a veces puede estresarme un poquito no encontrar lo que busco. Viene acompañado de una pequeña espátula para facilitar la aplicación y con una mini guía con consejos para aplicarlo. El punto fuerte de este corrector es sin duda, que además de camuflar perfectamente las imperfecciones es un excelente iluminador. Al aplicarlo sobre las ojeras, da mucha luz a la mirada,y como hace poco descubrí que las que tenemos el rostro redondeado tenemos que iluminar frente, nariz y mentón, que es justo donde tengo algún granito e imperfección, el efecto es un rostro sin imperfecciones y con un toque de luz que tu piel agradece y te aporta buena cara al instante. Tanto si lo utilizas sobre la base de maquillaje o debajo, queda genial y tienes tres tonos para elegir el que más le va a tu piel. Tips para sacarle el máximo partido: Para las ojeras, aplícalo con el dedo anular con pequeños toquecitos. ¿Tienes un granito? Con la espátula coge un poco de producto y traza una X sobre el granito o imperfección.A continuación difumínalo con una brochita o pincel...perfecto! Si tenéis que elegir corrector os aseguro que es una buena elección. Hasta pronto!!