El Bosque no es un simple enclave del mal, que aguarda al acecho para atrapar a quienes son lo bastante estúpidos como para adentrarse en él y cuyo daño se detiene si sois capaz de sacar a alguien de allí. Hay algo peor que monstruos en ese lugar: algo que crea monstruos.
"El poder que hay en el Bosque no es una bestia con un odio ciego; es capaz de pensar y trazar planes, y trabajar para lograr sus propios fines. Es capaz de ver en el corazón de los hombres, para envenenarlos aún mejor, para alcanzar su venganza". Eso es lo que ha ido descubriendo poco a poco Agnieszka, una chica sin gracia, obstinada y con un poder muy dormido dentro de ella. Tendrá la desgracia de ser elegida por el Dragón; un mago poderoso y misterioso que se lleva por 10 años a una joven del valle; muy al estilo de La Bella y La Bestia. Pero este no es un cuento de amor ni de hadas, es algo más oscuro y maligno representado por un Bosque que todo lo consume y lo destruye lentamente. Algo que el lector deberá descubrir y sumergirse paulatinamente al igual que los protagonistas, para detener la devastación del mal, extinguir la corrupción, terminar la pesadilla.
Esta historia los atrapará hasta el final, pues todo mal tiene su bien oculto, y este Bosque no terminará hasta devorarlo todo, de forma que nadie regrese nunca más.