Por Patricia O(Patokata), desde Uruguay“Tú y yo podremospasear juntos bajo ese cielo estrellado. Sólo es cuestión que cierres los ojos, mientras tetomo de la mano y te guío. Mira como brillan las estrellas, por allá hacaído una fugaz, ¿qué te parece si pedimos un deseo? Yo desearé ser tu caballero, el que viene a buscarteen un carruaje digno de una reina. Si, sé que tú desearas ser la princesa a laque se le perdió la zapatilla de cristal; si, sé que al final te encontraré yte desposaré como mi reina, la única reina de toda mi vida...”— Perdónseñor…pero ya va siendo hora de que la desconectemos.